Para los asíduos a IndieGoGo y amantes de la electrónica, esta historia puede que os suene, a los demás simplemente os recomiendo leerla para que veáis los riesgos que conlleva una campaña de crowdfunding. Esta es la historia de la estafa que consiguió engañar a 4299 personas que apoyaron la campaña.
Para los no entendidos, Arduino, por simplificarlo un poco, es una placa electrónica pensada para el aprendizaje rápido de utilización y programación de componentes electrónicos. Tanto en software como en diseño de componentes, es un proyecto Open Source, por lo que a pesar de que los que crearon la idea original venden sus propias placas con componentes y kits completos, los circuitoos los puede reproducir cualquier persona con capacidad de hacerlo.
Pues bien, allá por julio de 2013, un tal Harold Timmis, de la empresa Borderlands Electronics, lanzó a través de IndieGoGo una campaña de crowdfundinig para construir la placa de Arduino en masa para conseguir unos precios mucho más bajos que lo que cuesta la original. Esa campaña se llamaba «$9 ARDUINO Compatible STARTER KIT«, y como podéis ver en el enlace, consiguió un éxito tremendo, con más de 7000 financiadores y consiguiendo un 1300% el objetivo de financiación. Cabe destacar que una placa de Arduino original cuesta alrededor de los 40€, a lo que hay que sumarle los componentes, por lo que estaríamos hablando de unos 70-80€ tranquilamente, mientras en la campaña, gracias sobre todo a la cantidad de financiadores, se consiguió bajar tanto el precio de fabricación que las placas costaban lo que reza la campaña, 9$ más envío.
Unos meses tras finalizar la campaña, los backers comenzaron a recibir sus kits, y con mucha ilusión, vieron cómo lo que comenzó siendo un proyecto unitario, se podía convertir en una serie de proyectos de crowdfounding para incentivar la adquisición más barata de estos componentes. De hecho, tras el cierre de la campaña de Arduino a 9$, se lanzaron dos proyectos más con un éxito similar, la placa Be Shield, que era una extensión de la Arduino original, y el libro Arduino Basic Connections, que seguía la estela de los otros proyectos con otro éxito innegable. Ambos proyectos eran colaboraciones de Borderlands Electronics con distintos autores del mundo de la electrónica, que viendo la fama que conseguían las campañas, se lanzaron a crear más material para ampliarlas.
Y aquí es donde residió la base del problema que nos atañe. La confianza de los backers sobre los creadores e impulsores esas campañas tan exitosas fue la oportunidad que tuvieron sus creadores para conseguir estafar a una gran cantidad de personas. Esta vez hablamos de la campaña de aprendizaje «BE MAKER! Kit«.
«BE MAKER! Kit» conseguía aunar todos los componentes lanzados en campañas anteriores y sumarlos a una serie de componentes nuevos que gracias, de nuevo, a la cantidad tan grande de backers, conseguían rebajar muchísimo el precio original. Además, para los que habían financiado campañas anteriores, en esta campaña le daban posibilidad de conseguir sólo los componentes que le faltan.
La campaña «BE MAKER! Kit» comenzó el 25 de octubre de 2013 y finalizó el 30 de noviembre de ese mismo año, consiguiendo una recaudación de 248116$ con 4299 backers, convirtiéndose en una de las campañas más exitosas de IndieGoGo.
Pues bien, a día de hoy, las más de 4 mil personas que querían recibir sus kits de aprendizaje de Arduino, aun están esperándolos. Y es que según sus creadores, han tenido numerosos problemas logísticos los cuáles les han impedido actuar con toda la rapidez que quisieran.
El equipo de Be Maker!Pero esa es la versión de los creadores, la realidad es bien distinta. La campaña, de primeras, fue llevada por dos personas, uno de ellos era Harold, y otro un tal Dimitri, residente en Italia. Dimitri, según el propio Harold, era quien se encargaba de ir a China y contactar con las fábricas para conseguir unos precios correctos para la fabricación de dichos kits, pero Dimitri está desaparecido en combate. Además, Harold, ateniéndonos a los correos enviados como actualizaciones de la campaña, se ha mudado unas 5 veces en el último año en Estados Unidos, cosa que hace sospechar bastante, pues su excusa favorita para los retrasos es que como está de mudanza no puede contactar con Dimitri.
La cantidad de despropósitos que se han ido desarrollando en torno a estos dos personajes y la campaña en sí han conseguido que los backers se alíen en un frente común para conseguir más información veraz sobre Dimitri y Harold. De hecho, tal es el descontento, que se ha conseguido averiguar hasta datos familiares de los susodichos.
Dimitri tiene una hermana, en Italia, que tiene una empresa, junto al resto de su familia, la cual vende componentes electrónicos, que, casualidades de la vida, llevan los mismos empaquetados que deberían tener los originales de la campaña. De hecho, en los últimos días, se han dedicado a vender kits completos de electrónica con una rebaja importante sobre el precio original a través de una tienda en Ebay, que está a nombre de la madre de Dimitri.
¿Qué está ocurriendo? Pues bien, en los foros y en los propios comentarios de la campaña los usuarios están en ebullición, sacando información sin parar sobre estos personajes e intentando organizarse para conseguir, o lo que pagaron hace ya un año, o la devolución del diniero.
Y diréis, ¿por qué no se hace cargo IndieGoGo de esta estafa? Pues bien, no se sabe. La realidad es que Harold manda un correo cada quince días aproximadamente sobre actualizaciones en la campaña, pero estos correos son completamente vacíos de contenido, sin nada de información relevante. Entiendo que IndieGoGo al ver movimiento en la campaña crea que está en los plazos correctos, por que si no no se explica que más de 4mil personas hayan reclamado la devolución de su importe y no hayan recibido más que una respuesta tipo.
El motivo de escribir esta historia, es básicamente porque yo soy uno de los afectados de este fraude, y a mí personalmente me ha hecho reflexionar sobre el mundo del crowdfunding. Es cierto que la mayoría de las empresas o personas que buscan financiación para sus proyectos son honrados, pero como podéis ver en este caso, ese puede ser el detonante para convertirlo en una estafa.
Si os interesa seguir cómo va la investigación de los usuarios, podéis seguirla en los comentarios de la campaña, pues siguen activos, en el grupo de Facebook creado a tal propósito, que explica muy bien toda la información que yo he resumido, o en el foro creado para la ocasión.
Mientras veo pasar los días, seguiré esperando el próximo correo de Harold, a ver qué explicaciones nos da esta vez.