Leo en los Elegantes 100% que un fiscal general australiano llamado Michael Atkinson el cual quería que no se adoptara la calificación +18 en su amado país cosa que prohibe la venta de juegos con esa calificación, películas y el querido porno, ha hecho unas declaraciones unas declaraciones de esas de «déjalas ir» y que ni un colaborador de Sálvame hace estando de borrachera profunda:
«Sobre las dos en punto de la mañana recibí una amenaza por escrito que un gamer deslizó bajo mi puerta. Siento que mi familia y yo corremos más peligro por los jugadores que por las bandas forajidas de motoristas, que también me odian… Las bandas de moteros no han estado merodeando por mi puerta a las 2 A.M. Ha sido un videojugador.»
Según estas declaraciones soy más peligroso que un «Angel del Infierno». Es verdad. En mi barrio soy el terror. El demonio en carne y hueso y moreno que va por ahí llamando a los timbres y echando cartas por debajo amenazantes, incluso voy quemando tiendas GAME por allá donde paso. Lo mejor de todo es que voy corriendo, no en moto.
BOOOORN TO BE WIIIIIILD!