[Análisis] Beholgar, una aventura con sabor a los 90

¡Eh, colega! Me llamo Daniel Radley y tengo que contarte que soy súper fan de los juegos de mi consola de 16 bits, especialmente si son de plataformas con acción. Hace poco descubrí un juego que me ha dejado flipando: Beholgar. Creado por Serkan Bakar Games, distribuido digitalmente por Dolores Entertainment y distribuido físicamente por Tesura Games, una compañía que sigo de cerca.

Aunque ya me he echado varias partidas desde cero, hoy quiero lanzarme a una partida nueva y estaría genial que nos acompañéis en esta aventura. ¿Estáis listos para flipar? ¡Vamos peña, a darle caña a esto!

El regreso a casa

Desde que salí del cole, no he podido dejar de pensar en volver a casa y sumergirme de nuevo en el mundo de Beholgar. ¡Por fin llego a casa!, agarro el mando y enciendo la consola y tal como os prometí ahí vamos a por una partida desde el inicio. Al arrancar el juego, me meto de lleno en la historia y con una voz grave digo:

En el lago profundo

«Un bárbaro rema hacia la antigua tierra donde nació, su espada brillando a la luz de la luna. Han pasado 20 inviernos desde que se fue, y está ansioso por regresar. De repente, la niebla se disipa y una torre amenazante cruza el cielo. ¿Qué diablos ha sido eso?»

Al llegar a tierra, Beholgar entra al pueblo y se encuentra con un lugareño llamado Camasb que le dice: «Hagma, el malvado hechicero ha vuelto y está más fuerte que nunca. Hagma y sus ejércitos oscuros se propagan por todas partes. Muchos guerreros han intentado enfrentarse a él, pero la mayoría han muerto o desaparecido. Nadie ha podido llegar a la torre donde Hagma vive.»

Shagna el dragón

Camasb le dice a Beholgar que la única esperanza está en manos de un dragón: «Shagna, un dragón noble que vive en una cueva llamada Hemon. Beholgar tiene que convencer al dragón para que lo lleve hasta la torre. Si no detienen a Hagma, el maleficio se extenderá por todo el planeta.»

¡Vaya aventura! Nuestro bárbaro tiene que enfrentarse a enemigos y descubrir secretos para salvar a su pueblo y devolver la paz. ¡Esto es muy fuerte Doc! En estos momentos estáis deseando ver qué más nos espera en este emocionante viaje con Beholgar el Bárbaro.

Un control con doble filo

Cuando juego a Beholgar, veo que tiene cosas parecidas a esos juegos de acción y aventura estilo Metroidvania que me encantan. Explorar, pelear todo el tiempo, mejorar habilidades, encontrar monedas de oro y comprar objetos que me ayuden en la aventura son cosas que suelen pasar en estos juegos.

Lo que sí noto es que falta un mapa que me muestre dónde estoy y hacia dónde tengo que ir. Tan solo dispondremos de poder viajar al inicio de las zonas que ya hemos recorrido anteriormente mediante las hogueras que también son lugares que nos permiten guardar la partida.

Inspirados en juegos de recreativas

Mientras paso por los primeros niveles, veo que se parecen a esos juegos guapísimos de las salas recreativas, como el brutal Rastan Saga o el genial Black Tiger. A veces los saltos y las peleas son difíciles de cogerle el truco y me hacen sudar para llegar hasta los jefes finales. Aunque ya he jugado antes, todavía encuentro retos complicados de superar.

Con Beholgar puedo saltar, atacar y rodar por el suelo, pero al principio rodar no me protege de los ataques. Me mola un montón que además de mi espada, también tenga objetos que puedo lanzar y magia para ayudarme a resolver problemas. Eso sí, no puedo usar esos ataques secundarios todo el tiempo porque están limitados.

La espada no es el único arma que voy a encontrar, hay otras distintas que voy encontrando que me aportan cosas buenas y malas. También hay pociones que me ayudan a no envenenarme o curarme un poco. Los objetos como amuletos y anillos también están, pero son difíciles de encontrar o comprar porque son caros. No ayuda demasiado que cada vez que muero pierdo dinero, y la verdad que he muerto un montón de veces.

Lanzando el mando por la ventana

El juego tiene algunos fallos; algunos me ayudan a llegar a sitios a los que no debería, pero otros me hacen morir más veces de las que puedo contar. El fallo que más me fastidia es cuando guardo la partida, porque tras eso hay dos momentos en los que el juego se para de forma momentánea, y hasta que nos acostumbremos nos hará morir varias veces. Esto pasa también cuando llevo mucho tiempo sin guardar, porque el juego se satura y se vuelve loco.

Por último deciros que los jefes finales son un buen desafío, pero no están a la altura del resto del juego. No son tan listos como deberían y a veces las peleas contra ellos son muy difíciles o muy fáciles.

Gráficos y música aceptables, pero sin magia

Se ve bien, pero no alucinante

La verdad es que Beholgar tiene unos gráficos que están chulos, pero no me han dejado con la boca abierta. El estilo pixel art mola y los fondos tienen detalles guays, pero tampoco es algo súper impresionante. Las animaciones de Beholgar y los enemigos están bastante bien, aunque a veces el bárbaro se queda enganchado en una animación rara y eso no me gusta mucho. Aun así, en general el juego se ve bien, pero no es lo más increíble que he visto.

En las opciones hay filtros de imagen, pero no me han convencido mucho por su regulera calidad, así que los quité.

El musicote que me acompaña

La música de Beholgar está bien, pero no tiene muchas canciones. Eso sí, las que tiene son pegadizas y me gustan. A veces suenan un poco estridentes, pero en general están bien. Los efectos de sonido, como los golpes están bien, pero tampoco son lo mejor que he escuchado.

¿Qué está diciendo este nota?

Me fastidia un poco que la traducción al español no está muy bien hecha. Se nota que no han tenido mucho presupuesto para contratar a un buen traductor, y a veces es difícil entender lo que quieren decir. A pesar de eso, puedo seguir la historia y las instrucciones del juego sin muchos problemas.

Conclusiones de Beholgar

Beholgar es un juego que me ha gustado jugar, aunque no sea perfecto. Los gráficos están chulos y las animaciones son decentes, la música es pegadiza con toques de recreativas, pero hay cosas que podrían mejorar.

Lo que más me gusta es la jugabilidad y los desafíos que ofrece el juego. Me encanta la exploración y la lucha, además de las habilidades que voy obteniendo y las armas que encuentro por el camino. Aunque la traducción al español no es la mejor, puedo seguir la historia sin problemas.

Beholgar no es el mejor juego del mundo, pero me lo paso bien jugando con él y terminándolo en mas de una ocasión y eso es lo que importa. Si os gustan los juegos de acción y aventura, os recomendaría que le deis una oportunidad, porque seguro que os divertís un montón.

El rincón del redactor

Nos gustaría dar las gracias a Daniel, nuestro joven redactor ficticio por su fantástica dedicación y esfuerzo en la elaboración de este análisis de Beholgar.

Poco mas puedo aportar que el no dijese con sus palabras. Beholgar es en general un buen juego pero con ciertas carencias técnicas que por suerte no supondrán que disminuya su diversión. Otro punto que Daniel no ha contemplado es la duración del juego, si bien es algo que puede variar dependiendo de la habilidad de cada jugador, en general el juego durará entre unas tres y cinco horas, no es mala cifra pero a muchos les parecerá muy corto.

Beholgar ya está disponible en formato físico en edición normal y coleccionista tanto para Playstation 4 como para Nintendo Switch.

Ahora tan solo queda desear que los problemas de bugs y de rendimiento que sufre en Nintendo Switch se resuelvan pronto y puedan dejar un producto mas redondo.

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