Age of Empires 2: Definiteve Edition. Análisis PC

Hay pocos títulos que representen tan bien a toda una generación de jugadores como lo hace la saga Age of Empires. Cuando se lanzó la entrega original de Age of Empires 2, hace ya más de 20 años, se convirtió automáticamente en un referente del género de la estrategia en tiempo real gracias a algunos aspectos que seguimos teniendo presentes en esta Definitive Edition y sobre los que os hablaremos más adelante. Tras dedicarle muchas horas otra vez a esta nueva versión de uno de los juegos de estrategia más laureados, os contamos qué nos ha parecido con sus muchas luces y alguna sombra.

Conociendo la historia a través de Age of Empires

Adueñarse de un alto número de nuestras horas nunca ha sido algo difícil para Age of Empires 2. Con esta Definitive Edition, el número de horas que viene dispuesto a robarnos este juego se multiplica. Además de las 4 expansiones estrenadas tras el lanzamiento original del juego o en su versión HD, Conquerors, The Forgotten, The African Kingdoms y Rise of the Rajas, se suma esta vez una nueva expansión titulada The Last Khans. Con este nuevo contenido tenemos a nuestro alcance tres nuevas campañas, además de cuatro civilizaciones que hacen su primera aparición: la lituana, búlgara, tártara y cumana.

Estas tres nuevas campañas nos darán un buen puñado de horas de entretenimiento, además de la posibilidad de conocer nuevos árboles tecnológicos y nuevas historias. Pero en definitiva, las mecánicas jugables no cambian demasiado respecto a lo que ya conocemos de Age of Empires 2. Por este motivo queremos destacar la que nosotros consideramos la gran novedad jugable de esta entrega. Hablamos del modo El Arte de la Guerra: basado en el archiconocido libro de Sun Tzu, esta modalidad de juego nos ofrece pequeños desafíos en los que tendremos que aplicar las lecciones inmortalizadas por el estratega militar chino para lograr sacar ventaja en el campo de batalla. Estas pequeñas misiones nos ayudarán a comprender las mecánicas del juego desde lo más básico hasta los aspectos más complejos.

Estrategia en 4K

Si hay algo que no es estrictamente necesario dentro del género de la estrategia es que los juegos saquen músculo en su apartado gráfico. Cuando es necesario procesar la información de manera rápida, lo que se le pide a este tipo de juegos es que las tropas sean fácilmente reconocibles y diferenciables y que los menús sean sencillos de manejar. Todo esto no significa que no se agradezca que visualmente nos ofrezca algo llamativo, y es innegable que la edición definitiva de Age of Empires 2 ha mejorado notablemente en este aspecto.

Si jugamos habitualmente con la cámara alejada no lo notaremos demasiado, pero sí que es cierto que al hacer zoom podremos apreciar los nuevos modelados capaces de alcanzar la resolución 4K. También es muy mencionable la renovación de las animaciones, una sorpresa muy agradable si os gusta observar con detalle cómo se levantan o destruyen los edificios.

Es cierto que quizá a otros títulos no se lo tendríamos tan en cuenta, pero estamos ante un Age of Empires 2 lanzado hace dos décadas y tras todo el trabajo de remodelación que ha sufrido nos ha extrañado bastante ver como en los momentos de más carga en pantalla hemos tenido que sufrir algunos pequeños bajones del framerate. Es cierto que no era demasiado habitual, ni siquiera algo grave, pero no deja de llamar la atención teniendo en cuenta el mimo que se ha puesto en esta Definitive Edition.

En cuanto a la banda sonora sigue siendo tan épica como siempre que nos mantiene en la burbuja que crea Age of Empires 2 con los temas originales totalmente remasterizados. Por otro lado, está el doblaje, que ha llegado únicamente en latino, algo que es especialmente doloroso cuando escuchamos con ese acento a personajes como el Cid. Esto varía dependiendo del actor de doblaje de cada personaje, pero lo cierto es que es el punto donde más nos chirría Age of Empires 2 Definitive Edition.

Conclusiones de Age of Empires 2 Definitive Edition

A grandes rasgos no se le puede exigir nada más a esta revisión de uno de los grandes juegos de estrategia que han existido. Se ha mejorado todo lo necesario para adaptar el juego a la actualidad tanto en el apartado visual como en el contenido que ofrece. Destacar sobre todo el modo Arte de la Guerra como gran novedad y la banda sonora que sigue siendo memorable.

Entre lo que todavía podría haber sido un poco mejor tenemos esos pequeños bajones de framerate que impiden al juego ser excelso y un doblaje al español bastante flojo.