Weird Beluga Studio, un equipo español nos presenta su primer trabajo, Clid The Snail. La fama precede a este shooter isométrico que en el año 2019 se alzó con el galardón al mejor juego de Playstation Talents. Hemos tenido que esperar para comprobarlo por nosotros mismos, pero aquí tenéis lo que nos ha parecido la aventura de este valiente caracol.
Un motivo para disparar
Clid The Snail nos presenta a su protagonista, Clid, un caracol que, a pesar de la desaprobación de su pueblo, se dedica a acabar con las babosas que amenazan su ciudad. Por una serie de motivos, tendremos que salir de las murallas que nos protegen y aquí es donde empieza la acción.
Para los que no lo conozcan, Clid The Snail es un dual stick shooter, al estilo de Hotline Miami o el más reciente The Ascent. La diferencia con estos títulos es que el trabajo de Weird Beluga Studio ha intentado ir un paso más allá dentro de este género y dotarlo de una narrativa más profunda.
El resultado ha sido algo irregular, ya que en muchos momentos este esfuerzo narrativo se diluye debido a clichés demasiado típicos. Por el contrario, las conversaciones con los NPC pueden hacernos sentir muy identificados con un Clid que rápidamente se encuentra fuera de lugar. Como decimos, a nivel narrativo, este Clid The Snail nos deja luces y sombras y lo que podría haber convertido al juego en algo diferencial, se queda a mitad de camino en la mayoría de las ocasiones.
Estás rodeado, ¡Dispara!
Nos metemos ya en harina con lo que de verdad propone Clid The Snail. Desde el minuto 1 no falta acción y tendremos que aprender bien a movernos por los escenarios para no acabar reiniciando la partida tras ser vencido por una babosa.
Nos moveremos por el mapa con el joystick izquierdo, mientras que con el derecho apuntaremos con nuestra arma. Como es habitual en el género, en Clid The Snail, tendremos la oportunidad de lanzarnos rodando para evitar los golpes enemigos. A diferencia de lo que estamos acostumbrados, este título no premia tanto el disparar a todas partes sin pensar, sino que nos invita a llevar un ritmo de caracol y mantener la distancia con los enemigos y hacer ataques más certeros.
Pero eso no es todo ya que también tendremos que ir adaptando nuestro juego a las diferentes armas que iremos consiguiendo como escopetas o lanzagranadas que llenan el escenario de ácido. Aunque rápidamente cogemos las mecánicas y aprendemos como enfrentarnos a los diferentes enemigos, también hay ciertos problemas que afectan a la jugabilidad. El más llamativo es que, en ocasiones, los enemigos se nos acercan desde diferentes alturas, pero nosotros podemos apuntar únicamente a la altura en la que nosotros estamos.
Sin prisa, pero sin pausa
Como un caracol, así es el apartado técnico de Clid The Snail. El mundo creado por Weird Beluga Studio está lleno de detalles muy bien cuidados. Es cierto que no ofrece nada que no hayamos visto anteriormente, pero su rendimiento es muy sólido. Una mezcla de futurismo con unos escenarios que nos hacen entender que ha sucedido una especie de apocalipsis generan una esfera muy llamativa. A lo largo de los escenarios nos podemos encontrar un sinfín de guiños a juegos y accesorios de la historia de Playstation, como alguna Memory Card.
En cuanto a su rendimiento hay que remarcar que, en la nueva Playstation, no sufre en ningún momento. El framerate es muy robusto, lo que ayuda a la experiencia de juego de un título que nos exige estar muy atentos a todo lo que pasa en pantalla.
Pero también hay alguna parte negativa, y queremos mencionar sobre todo dos. En primer lugar, tiene que ver con la paleta de colores, y es que es todo tan oscuro, que en muchas ocasiones el entorno puede confundirse con los enemigos, lo que nos puede costar algún golpe.
Por otro lado, tenemos los momentos en los que nuestro protagonista se queda tras algún elemento del escenario. En estos casos a través de dicho elemento podremos ver la silueta de Clid, el problema es que los enemigos no se transparentan de la misma manera. Esto hace que haya puntos en los que sea imposible evitarlos y algo que complicaría mucho las tan de moda no-hit runs.
Conclusiones de Clid The Snail
La opera prima de Weird Beluga Studio es una agradable sorpresa. Clid The Snail es un título muy robusto dentro de su género. La experiencia es algo más lenta de lo habitual, lo que nos obliga a adaptarnos. Esto lo convierte en un título diferente, pero con muchos puntos fuertes.
Evidentemente, el juego tiene sus flaquezas, que achacamos a la inexperiencia del equipo de desarrollo. Aunque no son grandes problemas, lo cierto es que son detalles que no se pueden pasar por alto y te dejan un ligero sabor amargo. A pesar de esto, no podemos más que recomendar Clid The Snail para los amantes de los shooters isométricos.
Conclusiones
Clid The Snail
Un gran juego para los amantes de los shooters isométricos al que la inexperiencia del estudio le cuesta algunos fallos superficiales
PROS
- Le da un nuevo ritmo al género
- Técnicamente muy robusto
- El ambiente futurista está muy bien creado
CONTRAS
- La narrativa falla en ocasiones
- Imposible ver a los enemigos tras los objetos