Vuelve «La extraña pareja»
Una de las parejas más pintorescas y sádicas del mundillo de los videojuegos de acción ha regresado por fin, después de una ausencia que se ha alargado casi 3 años, su predecesor Kane & Lynch: Dead Men, fue uno de los primeros juegos que salió para las videoconsolas de sobremesa de esta generación y nos contaba una historia sencilla pero que le daba personalidad propia a este shooter, Asesino profesional conoce a Psicópata y ambos se meten en lios con la mafia. En este aspecto, poco han cambiado las cosas para esta segunda parte…
Pero… ¿de qué va este juego?
En esta ocasión, al contrario de lo que ocurría en la precuela, la historia se va centrar mucho más en Lynch (el psicópata), la acción nos situa en Shangai, donde Lynch pide ayuda a Kane para un trabajito con un tal Glazer, hombre de negocios anglosajón, en un asunto de tráfico de armas. Kane acudirá con la idea de que se trata de un trabajo fácil y por la necesidad de conseguir el dinero, por desgracia para ellos las cosas irán de mal en peor y tendrán que enfrentarse a las temibles triadas chinas. A pesar de que el desarrollo de la historia resulta satisfactorio, a más de uno le dejará con un cierto sabor insulso el epílogo del juego y además la personalidad de kane & Lynch no estará tan marcada y delimitada como en Dead Men, pero no es menester ahondar más en la historia para no caer en los temidos spoilers.
Luces… cámara… ¡ACCIÓN!
Si hay algo por lo que destaca a nivel gráfica esta secuela, es por su originalidad, ya que la idea que intentan transmitirnos es que toda la acción está continuamente grabada por una cámara de video, como si estuviéramos viendo una película de acción y lo cierto es que no sólo lo intentan, sino que además lo consiguen, con efectos granulados en la imagen, vemos también como en ocasiones se difumina la imagen y todo eso junto con los interiores tan detallistas, sucios y destruible que visitamos y la ambientación de las oscuras y peligrosas calles de Shangai hacen que Dog Days se desmarque de los demás shooters a nivel gráfico.
Por otra parte, la cámara que nos sigue logrará en más de una ocasión confundirnos e incluso marearnos sobretodo cuando pulsamos el botón de esprintar…tal es el traqueteo de la pantalla que es como si realmente llevásemos una cámara detrás de nosotros intentando seguir la acción. Por suerte conseguiremos adaptarnos un poco mejor seleccionando en las opciones de configuración que la cámara quede fija, a pesar de que este cambio en las opciones nos ayudará hay que decir que en ese sentido muchas veces nos sentiremos incómodos al avanzar ya que no sabremos muy bien dónde estamos, dónde está nuestro compañero y mucho peor…dónde están los enemigos, aunque sobre la dificultad hablaremos un poco más adelante.
El modelado de los personajes es bueno aunque no sobresaliente, nuestros protagonistas serán expresivos y saldrán mejor parados que el resto de pnj´s que pululan por el juego, que por otra parte se podría decir que la variedad de modelados de enemigos no resulta muy abundante. Sin embargo, merece un aplauso la buena labor efectuada en los entornos, que aparte de bien detallados son destruibles en casi todos los casos y eso quedará después de un intercambio de plomo en un escenario con nuestros enemigos.
Querría mencionar que he leido algún análisis y/o opinión que critica al juego porque se censure la imagen del cuerpo desnudo de una mujer y también cuando acertamos en la cabeza a nuestros enemigos «a quemarropa» y aunque no he hablado con ninguno de los responsables del juego no creo que la causa de ello venga motivado por miedo a que censuren el juego o por pura ñoñería, creo que forma parte de la estructura y sabor a «video casero» que han conseguido darle al juego, porque el juego es violento a más no poder y en la carátula especifica bien clarito que es para mayores de 18 años, pero sobre este tema, habrá opiniones para todos los gustos.
Pasamos ahora al aspecto sonoro del juego, y elemento más destacable es sin duda el doblaje del juego, que aunque no está al nivel de Arkham Assylum o Metal Gear Solid (psOne), raya un nivel bastante bueno y además nos resultará necesario para comprender y reirnos del humor negro del que hacen gala nuestros amigos, por otra parte a los que jugaron a la precuela, les agradará saber que los actores de doblaje que interpretan a Kane y a Lynch, son los mismos. El apartado musical nos pondrá en situación en todo momento ya que acompaña perfectamente a la, ya de por si, excelente ambientación de la que hace gala el juego.
Hora de ponerse a los mandos
Llega el momento de desentrañar qué nos ofrece Dog Days a nivel jugable, para empezar tendremos la posibilidad de jugar al modo historia en solitario (a Kane lo maneja la CPU), jugarlo pantalla partida con un compañero de fatigas (algo que siempre es de agradecer) o jugarlo online con amigos del Live o del PSN.
Podríamos resumir diciendo que es un shooter en tercera persona (al igual que su predecesor) que aunque no desmerece y resulta muy entretenido, no está al nivel de los grandes del género, es salvaje, violento, visceral y tiene sin duda alguna su punto de originalidad, además resultará todo un reto para los hardcore gamers pasarlo en el máximo nivel de dificultad ya que aunque se juegue en modo fácil, el juego no da mucha tregua a los jugadores nóvel que tienen poca paciencia porque el número de enemigos al que iremos enfrentándonos, en muchos casos será bastante amplio. En lo que se refiere a la inteligencia artificial de los enemigos, al principio pensé que eran medio lelos porque prácticamente se te echaban encima en plan kamikaze, pero después me di cuenta de dos detalles, por un lado mientras que unos van a por ti cual mihura desvocado, por otro, intentan rodearte y cogerte la espalda con lo cual tendremos que estar con 7 ojos y si además no te entiendes bien con tu compañero, la cosa se pone aún más difícil ya que muchas veces tendremos la sensación de que no estamos a salvo en ningún rincón del escenario. Un detalle jugable que no nos ha gustado es que en el cuerpo a cuerpo, nuestros protagonistas son inútiles, es cierto que un disparo a menos de un metro de distancia debería acabar con nosotros casi instantáneamente, pero ni Kane ni Lynch son capaces de propinar un sonoro golpe a nuestros enemigos ni tampoco pueden hacer alguna llave, se limitan a agarrarlo (si se deja) y usarlo como escudo o ejecutarlo con la pistola, creo que hoy día cualquier shooter nos da la oportunidad de golpear cuerpo a cuerpo a nuestros enemigos digitales. El estilo de cobertura que utilizan en el juego, es al más puro estilo Gears of War, dicho sistema aunque a veces sea algo traicionero y nos deje con «el culo al aire» (¿se puede decir culo?), podemos decir que funciona correctamente y nos permitirá disparar con bastante comodidad desde la «barricada» que hayamos escogido para protegernos, detalles como este harán que el control de los personajes se mucho más cómodo con respecto a Dead Men.
Como decíamos en el apartado anterior, la cámara de la que disponemos muchas veces puede ser mareante y traicionera debido al impacto y espectacularidad que han querido darle al juego, y esto se puede apreciar notablemente cuando pulsamos el botón para esprintar, podremos apreciar cómo traquetea la cámara y puede llegar a ser muy incómodo. En cuanto a las armas disponibles, podremos llevar una pistola (arma de una mano) y un rifle o escopeta (arma a dos manos) que podremos ir cambiando conforme las recojamos del suelo. Aunque la variedad se nos antoja suficiente, no hubiera estado mal el poder mejorarlas o personalizarlas, algo que cada vez está más de moda en este tipo de juegos.
Para finalizar la descripción del modo historia, debemos decir que su duración nos ha sabido a poco, básicamente si lo jugamos en modo normal con un amigo, en una tarde podemos acabarnos el juego a pesar de la dificultad de la que hace gala el juego y como decíamos al principio del análisis, este humilde colaborador opina que a nivel argumental está por debajo de su precuela y además la historia concluye de una forma un tanto fría.
Para terminar el análisis hablaremos de los modos multijugador, la mayoría de dichos modos son los de siempre y no merece la pena que nos centremos en ellos, salvo un par de excepciones, como por ejemplo la «Alianza Frágil», que ya estaba disponible en la primera parte, donde nos disponemos junto al resto de jugadores humanos a realizar un atraco y arramplar con todo lo que pillemos, obviamente el grupo se encontrará con obstáculos oficiales y cuando hayamos cogido todo el dinero que marque el objetivo tendremos que huir en una furgoneta, pero claro, la esencia de este modo es simple aunque original, cuantos menos seamos…más tendremos a repartir, con lo cual si eliminamos a algún compañero nos quedaremos con su parte del botín. Esto podemos hacerlo en cualquier momento de la partida, aunque si lo hacemos al principio se nos tachará de traidor y nuestros compañeros irán a por nosotros. Cabe destacar que si caemos, haremos «respawn» convertidos en policías y tendremos que ir a por nuestros antiguos y desagradecidos compañeros.
Otro modo de juego que resulta bastante divertido es el del poli-ladron, en el grupo siempre habrá un policía infiltrado que se seleccionará aleatoriamente y que sólo la persona elegida sabrá que lo es y su objetivo será echar por tierra el trabajo del grupo, se podría decir que todo el multijugador online de Dog Days (salvo el modo historia) gira en torno a la traición desmedida y al juego sucio, para algunos resultará divertido a más no poder y para otros puede resultar desesperante, pero en nuestra opinión, este planteamiento hace muy interesante el multijugador a pesar de los mosqueos que circularan por este servidor.
Para terminar…
Llega el momento final del análisis, las conclusiones del juego, no se puede decir que Dog Days sea un juego mediocre ni mucho menos, es original, salvaje, nos dará momentos de acción frenética, será un desafío tanto para los jugadores novatos como para los expertos y apenas nos dará un minuto de respiro, pero hay que decir que no da la talla frente a los grandes títulos del género. Esto no quiere decir que el juego no merezca la pena, porque hay que reconocer que su apuesta es innovadora y no dejará indiferente a nadie.
Lo mejor
- Vuelven nuestros queridos Kane y Lynch, ya teníamos ganas
- La ambientación de las calles de Shangai
- Su dificultad resultará interesante a los hardcore y podremos modificarla en función de nuestras habilidades
- Mejoría del control con respecto a Dead Men
- Entornos interactivos
- Originalidad refrescante, tanto en el modo historia como en el multijugador online
Lo peor
- Escasa duración del modo historia
- La cámara, aunque ayuda a la ambientación, a veces será un lastre jugable, sobretodo a pantalla partida
- A pesar de que empieza bien, esperábamos un argumento más elaborado
- Su dificultad, puede agradar a los hardcore, pero puede desesperar a los casual
- Poca variedad de enemigos
- El sistema de cobertura, aunque se agradece y mejora el control, a veces nos vende totalmente
Nota final: 7
Kane: «¡Te dije que vigilaras a los rehenes, no que te los cargaras!»
Lynch: «Bueeeeeno, pero no te enoooojes»
Gracias Alejandro Domínguez por éste pedazo de análisis.