G.I. Joe hizo su debut en 1964 de la mano de Hasbro, y rápidamente se convirtió en una de las líneas de juguetes de acción más influyentes de la historia. En una época en la que las muñecas dominaban el mercado infantil, G.I. Joe revolucionó el concepto de juguetes para niños, estableciendo el término «figura de acción» para alejarse de esa connotación. Pero el verdadero salto llegó en los años 80 con G.I. Joe: A Real American Hero, una reinvención de la franquicia que trajo consigo una rica historia que inspiró cómics, una serie animada y una línea de figuras icónicas, como Duke, Snake Eyes y Cobra Commander. La serie de televisión solidificó el lugar de G.I. Joe en la cultura pop, y además se convirtió en un referente para toda una generación que creció viendo a los héroes enfrentarse a las fuerzas de Cobra.
En el mundo de los videojuegos, G.I. Joe ha tenido varias apariciones, aunque de manera algo más discreta. Sus primeras aventuras virtuales llegaron en la NES, con títulos como G.I. Joe: A Real American Hero en 1991, un clásico de desplazamiento lateral. A pesar de algunas otras incursiones, como The Atlantis Factor, la franquicia no logró un impacto tan fuerte en la industria de los videojuegos como otras marcas.
Hoy, en plena fiebre del retro gaming y con el renacimiento de los juegos beat ‘em up, G.I. Joe ha decidido unirse a la fiesta. Títulos como Teenage Mutant Ninja Turtles: Shredder’s Revenge y Streets of Rage 4 han demostrado que hay una demanda por lo retro, y G.I. Joe: Wrath of Cobra, lanzado en septiembre de 2024, llega como un homenaje a la era dorada de los juegos de “yo contra el barrio”. Este nuevo título, que combina una jugabilidad nostálgica con un diseño gráfico actualizado, permite a los jugadores ponerse en la piel de sus héroes favoritos y revivir esas épicas batallas contra las fuerzas de Cobra, con toda la acción explosiva que siempre ha definido a la franquicia.
En estos tiempos donde lo retro no es solo una moda, sino una forma de reconectar con lo que nos hizo enamorarnos de los videojuegos, G.I. Joe: Wrath of Cobra está aquí de la mano de Maple Powered Games para recordarnos el por qué el combate cuerpo a cuerpo y las grandes aventuras siguen siendo tan adictivos. ¿Estás listo para revivir esos momentos de pura acción ochentera?
Una historia clásica que cumple sin innovar
La trama de G.I. Joe: Wrath of Cobra nos transporta de vuelta a la acción frenética y desenfrenada de los años 80, cuando los héroes más valientes de América se enfrentaban al mal absoluto. En esta nueva aventura, Cobra Commander ha resurgido con uno de sus planes más diabólicos hasta la fecha. ¿El objetivo? Controlar el mundo y sumirlo en el caos bajo el puño de hierro de Cobra. Y, como siempre, la única fuerza capaz de detenerlo es el equipo de G.I. Joe, compuesto por leyendas de la talla de Duke, Scarlett, Snake Eyes y Roadblock.
Desde el primer instante, el juego nos adentra en la clásica batalla del bien contra el mal que definió a una generación. Los G.I. Joe no tienen un minuto de descanso, ya que los Cobra Troopers, los Vipers y los despiadados Crimson Guards salen en oleadas a tratar de detenernos. Pero no es solo la infantería la que se interpone en nuestro camino: los temibles vehículos como el H.I.S.S. Tank y el C.L.A.W. están listos para aplastarnos, literalmente. Todo con bastante fidelidad a lo que vivimos en su epoca.
La misión está clara: detener a Cobra y derrotar a los villanos más emblemáticos de la franquicia. Destro, con su impenetrable máscara de acero, lanza su ingenio mortal; Baroness, siempre tan peligrosa como astuta; Serpentor, la creación genética definitiva de Cobra, y, por supuesto, el despiadado Cobra Commander, quien se esconde tras las sombras mientras sus legiones se lanzan sobre ti.
Una base sólida que necesita ciertas mejoras
G.I. Joe: Wrath of Cobra busca revivir la acción clásica de los beat ‘em ups con una experiencia que mezcla mecánicas retro y un toque moderno. Con personajes icónicos y niveles llenos de elementos familiares, el juego logra capturar la esencia de los títulos de antaño. Sin embargo, aunque el corazón del juego es fuerte, algunos detalles en la jugabilidad impiden que alcance el verdadero potencial que podría tener dentro del género.
Combate y control: Golpes poderosos, pero imprecisos
El sistema de combate de Wrath of Cobra está diseñado en torno a tres niveles de daño: ataques ligeros, medianos y fuertes, que quitan 10, 20 y 30 puntos de vida, respectivamente. Aunque el sistema básico funciona bien para mantener la acción constante, la verdadera diversión está en las armas que puedes encontrar durante los niveles. Desde rifles láser hasta lanzagranadas, estas armas añaden interés al combate, especialmente en situaciones donde te enfrentas a grandes grupos de enemigos. Sin embargo, hay ciertos problemas en su implementación, ya que es fácil soltar un arma accidentalmente al correr o realizar un ataque mientras te mueves, lo que le resta bastante fluidez al juego frustrando en ocasiones.
El manejo del personaje es un punto donde el juego podría haber brillado, pero la falta de precisión en ciertos momentos afecta la experiencia. Al usar la cruceta digital, es fácil activar un dash no deseado o lanzar un ataque con carrera sin intención, lo que puede desestabilizar el ritmo del combate. A esto se suma un sistema de salto limitado que no permite cambiar la dirección de los ataques en el aire, lo que reduce la flexibilidad y la precisión en situaciones críticas.
Escenarios y mecánicas de nivel: Clásico pero efectivo
Los niveles están bien diseñados y mantienen un buen equilibrio entre duración y desafío. A lo largo de los 12 escenarios, te encontrarás con trampas y obstáculos familiares del género, como suelos electrificados, cajas que contienen objetos, huecos que pueden hacer caer a los enemigos o a ti mismo, y armas robóticas que emergen del suelo para complicar tu avance. Aunque estas mecánicas no son particularmente innovadoras, funcionan bien para ofrecer una experiencia familiar y nostálgica.
Los enemigos van desde tropas básicas de Cobra hasta grandes máquinas como el H.I.S.S. Tank. A medida que avanzas, los enemigos se vuelven más duros, pero el juego asegura que siempre tengas una variedad de oponentes y patrones de ataque que te mantendrán alerta. Sin embargo, algunas fases pueden sentirse algo repetitivas y, aunque hay jefes icónicos, a menudo caen en la trampa de ser muy repetitivos, prolongando los combates sin añadir complejidad estratégica.
Ataques especiales y habilidades: Diversidad que brilla en Wrath of Cobra
Uno de los aspectos más divertidos del juego es la variedad de ataques especiales. Cada personaje cuenta con una habilidad única que añade una capa de estrategia y emoción al combate. Duke, por ejemplo, puede llamar a un bombardeo aéreo que destruye todo en pantalla, mientras que Snake Eyes invoca a su lobo Timber, que se une al combate para atacar a los enemigos cercanos por un tiempo limitado. Estos ataques especiales son esenciales para mantener el control en los momentos más caóticos, pero el juego falla en permitir que los uses adecuadamente cuando más los necesitas. Si te encuentras atrapado en un combo de varios enemigos, puede ser difícil activar el especial antes de que te den un momento de respiro y esto puede que sea demasiado tarde en muchas ocasiones.
Rejugabilidad y modos adicionales: ¿Suficiente para volver?
El juego ofrece varios modos adicionales que buscan aumentar la rejugabilidad, como Boss Rush y desafíos con mayor dificultad. Estos modos, junto con la posibilidad de desbloquear personajes secretos y diferentes mejoras en la tienda in-game, añaden incentivos para volver a jugar, especialmente en cooperativo local. Sin embargo, la repetitividad de algunos niveles y la falta de profundidad en el combate hacen que estos extras no sean suficientes para mantener la atención de los jugadores a largo plazo.
Wrath of Cobra brilla como un arcade ocasional, especialmente en modo cooperativo local, donde la experiencia multijugador añade un nivel de diversión como siempre sucede en este género.
La tienda in-game: Un arsenal de desafíos y sorpresas en Wrath of Cobra
G.I. Joe: Wrath of Cobra incorpora una tienda in-game que permite desbloquear nuevos modos y personajes a cambio de los diskettes que recoges a lo largo de las partidas. No son muchos pero si bastante interesantes.
Desbloquea el Modo Arcade
Por 2500 diskettes, puedes acceder al Modo Arcade, donde el nivel de dificultad se incrementa considerablemente. No solo enfrentarte a enemigos más duros será un reto, sino que este modo introduce un medidor especial alternativo que altera la manera en la que gestionas tus habilidades. Si la campaña original te pareció demasiado fácil, este modo es para ti. Aquí es donde los verdaderos soldados de G.I. Joe se prueban en combate.
Modo Avalancha de Jefes: Una prueba de resistencia
¿Crees que puedes vencer a los jefes de Cobra sin sudar? El Modo Avalancha de Jefes, disponible por 2500 diskettes, te lanza directamente a una secuencia ininterrumpida de combates contra jefes. Cada uno de ellos, desde Destro hasta Cobra Commander, te pondrán al límite en una sucesión intensa que no deja espacio para errores. Es el desafío definitivo para quienes dominan las mecánicas del juego.
Desafíos Extremos: Modo 1 Golpe y Problema Doble
Si lo tuyo son los desafíos al límite, el Modo 1 Golpe es tu mejor opción. Con 1500 diskettes, te enfrentarás a una realidad brutal: cualquier golpe, tanto tuyo como de los enemigos, será un KO instantáneo. Cada movimiento cuenta, y no hay margen para el error.
Por otro lado, si lo que buscas es llevar la acción a su máximo esplendor, el Modo Problema Doble, también por 1500 diskettes, duplica el número de enemigos en pantalla. Esto transforma cada nivel en un verdadero campo de batalla donde las oleadas de enemigos te pondrán a prueba en términos de control y estrategia.
Barajas de Enemigos y Objetos: Aleatorización total
Por 1500 diskettes cada uno, puedes desbloquear los modos Baraja de Enemigos y Baraja de Objetos. El primero cambia aleatoriamente los enemigos en cada nivel, haciendo que la partida sea completamente impredecible, mientras que el segundo hace lo mismo con los objetos que encuentras a lo largo de los niveles. Ambos modos añaden un factor de sorpresa y hacen que cada partida sea distinta, ideal para los que buscan revivir el juego con cada nueva sesión.
Alto Impacto: El golpe maestro
Para los jugadores que prefieren acabar con sus enemigos de un solo golpe, el Modo Alto Impacto, disponible por 1500 diskettes, dobla la fuerza de tus ataques. Este modo es perfecto para quienes disfrutan de un estilo de combate más agresivo y dominante, dándote la capacidad de eliminar enemigos con una brutalidad sin precedentes.
Nuevos Personajes: Más allá de los clásicos
Si sientes que necesitas más variedad en tus filas de G.I. Joe, puedes desbloquear a Gung-Ho y Ripcord por 2000 diskettes cada uno. Estos personajes traen consigo nuevos estilos de combate. Ya sea con la fuerza bruta de Gung-Ho o la agilidad de Ripcord la acción está asegurada.
Un tributo visual al pasado
G.I. Joe: Wrath of Cobra destaca por su fidelidad visual tanto en personajes como en vehículos y escenarios, capturando perfectamente la esencia de la serie animada original. El juego es vibrante y dinámico, con una paleta de colores bien seleccionada y animaciones fluidas que añaden mucha vida a la acción en pantalla. Las transiciones entre los movimientos de los personajes y los efectos visuales son satisfactorias, lo que crea una experiencia visual atractiva y nostálgica. A pesar de ser un juego lanzado en 2024, no busca ser un portento técnico, sino que su objetivo principal es ofrecer una estética que evoca a los clásicos juegos arcade.
Uno de los grandes aciertos del equipo de desarrollo es que el juego no tiene altas exigencias técnicas, lo que permite que sea accesible en una amplia gama de dispositivos, incluso en ordenadores con varios años de antigüedad. Los requisitos mínimos son modestos, con soporte para sistemas operativos desde Windows 7 en adelante, procesadores i3 y gráficas antiguas como la NVIDIA GT 320 o AMD Radeon HD 5570. Esto lo convierte en una opción ideal para quienes buscan una experiencia retro sin necesidad de una máquina moderna.
Un pero en los menús de Wrath of Cobra
Sin embargo, uno de los aspectos que más contrasta con el excelente apartado visual es el diseño de los menús. Las fuentes utilizadas no parecen estar a la altura del resto del juego, generando una sensación de provisionalidad que podría pasar en una beta, pero que desentona en una versión final. Los menús, aunque funcionales, carecen de la cohesión estilística que debería acompañar un título con tanto cuidado en los detalles gráficos. Esto, sin duda, es uno de los puntos que desmerece el conjunto, que por lo demás es bastante sólido.
Banda sonora: Ritmo arcade al nivel de los mejores clásicos
La banda sonora de G.I. Joe: Wrath of Cobra se convierte en una pieza clave que acompaña a la acción frenética del juego. El encargado de dar vida a esta música es Tee Lopes, un compositor ampliamente reconocido en la industria del gaming retro. Lopes, quien ya ha dejado una huella imborrable en títulos como Sonic Mania y Teenage Mutant Ninja Turtles: Shredder’s Revenge, ha logrado, una vez más, crear una atmósfera que nos transporta directamente a los salones recreativos y, por qué no, a aquellos momentos en casa con nuestras consolas de los 80 y 90.
La música del juego adopta un estilo arcade clásico, lleno de ritmos enérgicos y melodías pegadizas que se sienten familiares para cualquier amante de los juegos retro. Cada nivel cuenta con un tema propio que realza la experiencia, y muchos de estos tienen claras influencias de la era dorada de los videojuegos arcade, recordándonos los icónicos sistemas de sonido de 16 bits de la época. Estos toques reminiscentes de la Sega Megadrive, combinados con la energía propia del combate, hacen que la banda sonora sea más que un acompañamiento; se convierte en un impulso que mantiene viva la intensidad de cada pelea.
Conclusiones de G.I. Joe: Wrath of Cobra
G.I. Joe: Wrath of Cobra es un curioso intento de acercarse a los clásicos beat ‘em ups, ofreciendo a los fans de la franquicia una dosis de nostalgia. A pesar de no ser el mejor en su género, el juego captura con éxito la esencia de los arcades de los 80 y 90. Con sus personajes icónicos, un estilo gráfico vibrante y una banda sonora que nos transporta a los salones recreativos, ofrece una experiencia entretenida y adictiva, especialmente cuando se juega en modo cooperativo.
Si bien hay ciertos problemas en los controles y una repetitividad en algunos niveles, estos aspectos no quitan mérito a lo divertido que puede ser jugarlo, sobre todo con amigos. Wrath of Cobra no pretende reinventar el género, pero logra cumplir su propósito: darnos horas de entretenimiento con ese toque retro que tanto nos encanta. Si eres fan de G.I. Joe o de los beat ‘em ups de antaño, este título te brindará muchas partidas llenas de acción y diversión.
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Conclusiones
G.I. Joe: Wrath of Cobra
G.I. Joe: Wrath of Cobra vuelve para ofrecernos una experiencia arcade como la de aquellos años dorados de los salones recreativos.
PROS
- Fidelidad visual a la serie original de G.I. Joe.
- Jugabilidad clásica de beat 'em up con mecánicas nostálgicas.
- Banda sonora de alto nivel a cargo de Tee Lopes, con un estilo arcade clásico.
CONTRAS
- Control de personajes poco preciso en ciertos movimientos, especialmente en el salto.
- Menús y fuentes mal diseñadas, que restan cohesión al apartado visual.
- La falta de profundidad en el combate puede limitar el interés a largo plazo.
G.I. Joe: Wrath of Cobra Precios
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