[Análisis] Insectum – Epic Battles of Bugs

DevilishGames, un estudio español con una interesante trayectoria en la creación de juegos únicos e innovadores, nos sorprende una vez más con su último título, Insectum: Epic Battles of Bugs. Tras más de 25 años en la industria, y con juegos como Minabo, Path to Mnemosyne y Onirike en su historial, esta vez apuestan por algo diferente: un juego de estrategia en tiempo real que combina cartas y batallas épicas entre insectos.

Dirigido a un público aficionado a los juegos de cartas y la defensa de torres, Insectum busca ofrecer una experiencia fresca y accesible. Con una cantidad considerable de niveles, los jugadores deberemos gestionar sus tropas de insectos, evolucionándolos y utilizándolos con astucia para defender sus nidos y conquistar los de sus rivales. Este juego representa un claro cambio de dirección para DevilishGames, que apunta hacia un nuevo tipo de jugador.

Con una jugabilidad intuitiva y un enfoque en la estrategia accesible, Insectum promete ser una puerta de entrada ideal para quienes buscan iniciarse en el género, brindando tanto entretenimiento como aprendizaje. ¿Quieres saber más? Acompáñanos en este análisis.

Controla la ira de tus insectos

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En Insectum: Epic Battles of Bugs, la jugabilidad se basa en la combinación de estrategia en tiempo real y el uso de cartas para desplegar insectos en el campo de batalla, con un enfoque en la simplicidad pero ofreciendo profundos elementos tácticos. El juego se desarrolla en escenarios con tres carriles, cada uno conectado a una madriguera o hormiguero desde donde emergen tus insectos. El objetivo es atacar y defender estratégicamente estos carriles para conquistar los nidos enemigos o acabar con todos sus insectos.

Tres categorías de insectos a elegir

Los insectos están divididos en tres tamaños que dan a entender su principal utilidad:

• S (Pequeños): Insectos rápidos y ágiles, como la Vespa Mandarina o Culicidae, que son perfectos para atacar desde la retaguardia, recoger objetos y esquivar ataques. Son muy útiles para aprovechar oportunidades rápidas y recoger objetos valiosos en el campo de batalla.
• M (Medianos): Estos insectos ofrecen un equilibrio entre ataque y defensa. Ejemplos como Orycles Nasicornis o Blattodea pueden atacar con fuerza moderada y resistir el daño, siendo ideales para crear presión sostenida en el campo de batalla.
• L (Grandes): Insectos como la Mantis Religiosa o Androctonus funcionan como tanques. Tienen habilidades poderosas pero son más lentos, y se usan para bloquear los ataques enemigos o infligir un gran daño a las defensas rivales.

Objetos y recursos en el campo de batalla

Durante las partidas, aparecen varios tipos de objetos que harán nuestras partidas más interesantes:

• Botellas de energía: Estas permiten acumular energía y cuando esté llena la barra, permite lanzar ataques devastadores, arrasando con los enemigos en los carriles disponibles y devolviendo nuestros insectos a la recámara para ser utilizados de nuevo. Debemos tener insectos en la recamará si no, no nos permitirá lanzarlo.
• Bolas de energía: Recuperan la vida de tus madrigueras, lo cual es vital para mantener tus insectos en el campo de batalla.
• Elixires: Se utilizan para mejorar las habilidades de ataque y defensa de tus insectos. Serán bastante abundantes encontrarlos, inclusive de forma excesiva llegando a acumular elixires que nunca podremos utilizar por haber completado todas las mejoras.

Cada bicho por su carril

El sistema de combate de Insectum: Epic Battles of Bugs se estructura en tres carriles, donde cada carril está conectado a una madriguera o «base» desde la que se lanzan los insectos para atacar o defender. Cada carril tiene un botón asignado que permite lanzar los insectos correspondientes, y si una madriguera es destruida, todos los insectos desplegados en ese carril son eliminados. Esta mecánica implica un manejo cuidadoso de los recursos, ya que la pérdida de una madriguera puede desbalancear completamente la estrategia del jugador.

Una de las claves del éxito en Insectum es saber cuándo desplegar cada tipo de insecto según las necesidades del combate. Los insectos de tamaño M y L (medianos y grandes) son especialmente útiles para resistir ataques y proteger las madrigueras, funcionando como «tanques» que soportan el daño del enemigo. Por otro lado, los insectos S (pequeños) son ágiles y eficaces para recoger objetos del campo de batalla rápidamente o atacar desde posiciones seguras, permitiendo reaccionar con rapidez en momentos críticos.

El uso de insectos voladores añade una capa adicional de estrategia. Estos insectos tienen la capacidad de evadir ataques terrestres y atacar en zonas que podrían ser vulnerables si no se les presta atención. Sin embargo, planificar mal la defensa o el ataque puede resultar en que los enemigos se abalancen sobre tus madrigueras antes de que tengas la oportunidad de desplegar una respuesta adecuada.

El sistema de cartas es otro elemento base. Los jugadores tenemos acceso a cinco huecos activos, donde los insectos disponibles se muestran de forma visible. Cuando se lanza un insecto, ese espacio se libera y es reemplazado por otro insecto de manera aleatoria, lo que añade una variabilidad a cada partida. Seleccionar uno de los cinco insectos disponibles requiere el uso de la cruceta o el stick analógico para moverse entre ellos. El tiempo de recarga para que un nuevo insecto ocupe el lugar del lanzado dependerá de su tamaño, ya que los insectos más grandes tardan más tiempo en estar disponibles nuevamente​.

Modo historia y multijugador

El modo historia actúa principalmente como un extenso tutorial donde el jugador va desbloqueando y aprendiendo a usar nuevos insectos, lo que facilita la transición al modo multijugador, que es donde el juego realmente brilla. Con partidas que duran entre 4 y 6 horas, el modo historia enseña las bases de la estrategia necesaria para las partidas más avanzadas, ya sea contra amigos en multijugador local o contra la IA en partidas más difíciles.

Diversidad de escenarios y elementos interactivos

El entorno también juega un papel fundamental en las partidas. Los escenarios tienen vida propia con elementos como gotas gigantes, nieve y plantas carnívoras, que pueden ayudarte o entorpecer tus movimientos. Cada uno de los seis escenarios presenta sus propias dificultades, obligando a los jugadores a adaptar su estrategia según el terreno.

Simplicidad y profundidad

Con solo cuatro botones principales —tres para los carriles y uno para lanzar ataques especiales—, Insectum es fácil de aprender pero difícil de dominar. A medida que juegas más, la complejidad de las combinaciones de insectos, el uso de objetos y la gestión de los recursos se convierte en la clave para las victorias.

Una estética algo anticuada pero que funciona

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Insectum no es un juego que apunte a ser visualmente espectacular, pero cumple sobradamente con su cometido dentro del género de estrategia. A nivel gráfico, se muestra sencillo, sin grandes alardes visuales. Los diseños de los insectos son coloridos y de tamaño adecuado, lo que facilita su identificación durante las batallas, un aspecto fundamental para mantener el enfoque estratégico en tiempo real. No esperemos gráficos propios de un juego triple A; sin embargo, los recursos claramente han sido enfocados hacia la jugabilidad, que es donde el juego realmente destaca.

El movimiento de cámara y el zoom al inicio de las partidas añaden un toque dinámico, pero el juego rápidamente se centra en los escenarios fijos donde ocurren las batallas. Estos entornos, aunque variados (junglas, volcanes, montañas heladas), son simples y funcionales, ofreciendo el suficiente contraste para que el jugador se concentre en la estrategia. Los efectos especiales son moderados, lo justo para dar vida a los ataques e interacciones entre los insectos, sin abrumar al jugador. Este apartado visual y técnico, sin ser ambicioso, logra su propósito: permitir que el jugador se enfoque en la acción y en la toma de decisiones.

En cuanto al rendimiento, el juego se comporta de manera fluida en todas las plataformas, un aspecto crucial en un título donde la velocidad y precisión de las decisiones tácticas juegan un papel fundamental.

Este enfoque minimalista en lo técnico demuestra que Insectum apuesta por la jugabilidad por encima del espectáculo visual, permitiendo partidas rápidas y dinámicas sin preocuparse demasiado por el apartado gráfico.

Conclusiones de Insectum – Epic Battles of Bugs

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Insectum: Epic Battles of Bugs es un título que, aunque no destaque por sus gráficos o historia, ofrece una experiencia estratégica accesible y entretenida, ideal para quienes se inician en el género de la estrategia en tiempo real con cartas. Su simplicidad, tanto en los controles como en la mecánica, permite partidas rápidas y dinámicas, perfectas para disfrutar solo o con amigos en modo local.

Si buscas un juego ligero, sin una curva de aprendizaje compleja pero con suficiente profundidad para mantenerte enganchado, Insectum es una opción recomendable para pasar un buen rato sin grandes complicaciones.

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