[Análisis] Star Wars Outlaws, un mundo abierto para disfrutar

Desde que el universo de Star Wars se mezcló con el de los videojuegos, nunca se ha visto un mundo abierto, al menos no específicamente. Esto en parte se puede deber a que la creación de George Lucas es realmente inmensa y abarcarlo todo sería demasiado complicado o costoso. Star Wars Outlaws no va a ofrecernos una visión de los jedis y los sith, sino que se adentra en el mundo de los sindicatos, los contrabandistas y la vida tan dura que tienen sus habitantes por delante con un universo en guerra.

El título no es perfecto, pero sí que nos ofrece un gran número de puntos positivos que agradará y mucho a los fans. Todo ello salpicado con el humor habitual de la franquicia y un sinfín de posibilidades que, esperamos, sea solo el principio.

Kay Vess, la versión femenina de Han Solo

Star Wars Outlaws nos cuenta la historia de Kay Vess, una contrabandista/ladrona que intenta sobrevivir en un mundo donde el imperio sigue dando caza a la rebelión. Ubicada entre el Imperio Contraataca y el Retorno del Jedi, tenemos un mundo dominado por distintas facciones criminales que quieren gobernar bajo el paraguas de los sith.

Pronto nos damos cuenta de cómo es Kay Vess y es que muy rápido nos recuerda bastante a una versión juvenil y femenina de Han Solo. Una contrabandista que por necesidad ha tomado decisiones arriesgadas y que, a pesar de todo, en el fondo tiene buen corazón. Desde el inicio vemos que Kay quiere abandonar el planeta, hacerse rica de manera rápida y vivir como siempre ha soñado, aunque no va a ser sencillo.

En Star Wars Outlaws existen distintas facciones criminales que son las que realmente cortan el bacalao por debajo de El Imperio. Vamos a tener que comerciar, hacer tratos e incluso huir de muchas de ellas y es que dependiendo de nuestras acciones, elecciones y comportamiento en general, la reputación de su protagonista cambiará. Esto puede hacer que nos ofrezcan misiones, que nos odien y nos disparen nada más vernos, que nos den refugio en uno de sus campamentos… ¿El imperio? Pues va a hacer de la policía al más puro estilo GTA. Si nos pillan cometiendo un delito nos perseguirán e intentarán darnos caza. Dependiendo de la clase de delito lo harán con mayor o menor fuerza, hasta el punto de soltarnos artillería o los comandos de la muerte.

Una vez sabemos esto, dependerá del jugador y de cómo bordee los claros oscuros de Star Wars Outlaws, tendrá mejor reputación con unas que con otras. Sin embargo, el sistema sí que tiene algunos problemas y es que sin ser muy complicado, es más o menos sencillo llevarse bien con casi todas las facciones. Esto hace que se eviten ciertos momentos de tensión pero que hubiera ayudado mucho a tener una visión más orgánica y viva de un sistema de facciones.

Hablando de un sistema orgánico, lo cierto es que cómo se ha llevado a cabo la exploración y el sistema del mundo abierto en Star Wars Outlaws es todo un acierto. No es que vaya a ser un cambio radical y que redefina el género, pero sí que es cierto que deja atrás uno de los sistemas más utilizados en los últimos años: mapas cargados de marcas. No lo entiendas mal, esas marcas siguen existiendo, pero no aparecerán nada más lleguemos a un mapa. Tendremos que ir descubriendo estas zonas mediante la exploración, escuchando una conversación a escondidas, reuniendo información ayudando a un NPC… lo que hace que el mundo sea mucho más orgánico.

También las misiones secundarias han sufrido modificaciones. Para empezar, se ha optado más por la calidad que por la cantidad, algo de agradecer, hasta el punto que a veces cuesta distinguir si una misión es principal o secundaria. Suelen acabar con una recompensa de facción, lo que modifica los atributos con el resto, y al no haber tantas, no se vuelven tediosas, además de estar muy bien estructuradas y cuidadas.

En general, Star Wars Outlaws se puede terminar en unas 20 – 25 horas, con alguna que otra misión secundaria, pero se le pueden añadir una decena o dos más completándolo al máximo.

Sindicatos, acción y sigilo, una magnífica mezcla

Como decíamos, los sindicatos van a ser una de las principales mecánicas que tendremos que encarar en Star Wars Outlaws. Sin embargo, no es la única y es que para el progreso del personaje, por ejemplo, se ha optado por ser lo más sencillo e intuitivo posible. No hay experiencia, ni niveles ni equipo de distintos colores. Lo que tendremos son habilidades que podremos ir consiguiendo, así como especializaciones que desbloquear. Estas son muy importantes para el progreso (como por ejemplo conseguir un artilugio que nos permite llegar a zonas antes bloqueadas), y las conseguiremos de varias maneras. Ya sea haciendo una misión de una facción en específico, consiguiendo los materiales necesarios o pegando 25 tiros en la cabeza, el equipo mejorará y desbloqueara la especialización.

La acción y el sigilo es otra de las mecánicas que estará muy presente. En general el juego se desenvuelve muy bien en ambos aspectos, con unos escenarios muy bien desarrollados que permite encarar los distintos retos de varias maneras. Sin embargo, la IA va a empañar bastante esta tarea y es que es bastante mala. A veces son muy suicidas, otras ni se cubren bien o incluso se llegan a entorpecer entre ellos… Es una de las grandes cuentas pendientes del juego.

Nix, nuestro fiel ayudante (porque más que una mascota es parte de la familia de Kay), también podrá desarrollarse y ganará nuevas habilidades con el tiempo. Este simpático personaje formará parte en casi todo momento de la acción y el sigilo, brindando mayores posibilidades. Hablando de personajes, también hay que hacer una mención especial al droide ND-5, cuya carisma y cinismo contrarrestan al personaje de Kay y acaba ofreciendo unas conversaciones magníficas. El resto de tripulantes es más anodino y pasan más bien sin pena ni gloria.

La parte de los dogfights o lucha de naves es un punto a la que le tenía personalmente muchas ganas. Tras disfrutar como un enano de juegos como X-Wing vs Tie Fighter esperaba ver algo realmente que me enganchara, y por desgracia no fue así. No es que sea un horror ni nada por el estilo, pero está claro que es un sistema al que no le han prestado ni mucha atención ni mucho presupuesto. Es todo terriblemente sencillo hasta el punto de que se agradece que no haya muchas de estas batallas obligatorias. Se puede explorar, conseguir recursos y visitar algún que otro lugar de esta manera, pero en general no hace falta ni, sinceramente, el sistema lo merece, al menos para mí.

Por último cabe mencionar algunos pequeños minijuegos que estarán presentes durante todo el título, como el rítmico para abrir puertas. Esto se acaba haciendo un poco pesado por el número de veces que tendremos que desarrollarlo, aunque ofrece algunos momentos de tensión ya que no pausan el juego. Si nos pillan en una puerta intentarán acabar con nosotros y hay que estar muy atentos.

Star Wars como pocas veces se ha visto

Star Wars Outlaws es un título a tener muy en cuenta desde el apartado técnico. En su inmensa mayoría, al menos en la versión de PC que hemos probado, luce muy bien en muchos aspectos. Los escenarios son una maldita maravilla, especialmente entre los distintos biomas que tendremos a nuestra disposición en los cinco planetas que visitaremos. Las ciudades también estarán muy bien representadas, aunque un poco más de vida orgánica y variedad no le hubiera ido mal. En donde sí que hay bastantes problemas y queja es en las animaciones. En este aspecto el estudio todavía tiene mucho que mejorar y es que hay animaciones horrorosas, gestos raros, inexpresión y mejor no hablar del pelo de algunos.

Por otro lado, el apartado sonoro es una delicia. La banda sonora casa a la perfección con lo que sería una película de Star Wars, y el título llega totalmente localizado al castellano, por lo que no hay excusa alguna para las muchas horas que nos ofrece el juego.

Conclusiones de Star Wars Outlaws

Si bien es cierto que se llevaba mucho tiempo esperando un mundo abierto basado en el conocido universo de George Lucas, no nos esperábamos que una empresa como Ubisoft fuera a realizar tantos cambios en su seña de identidad y le sentaran tan bien. Star Wars Outlaws está perfectamente enfocado y localizado a lo que serían los bajos fondos, esos que operan bajo la ley de El imperio y que nos ofrece un mundo muy vivo y rico que explorar.

La pena es que haya pequeños problemas que «molesten» a la hora de disfrutarlo, empezando por una IA que consigue que situaciones que deberían ser muy complicadas acaben pareciendo un chiste por lo mala que es. La inmensa mayoría de nuestras muertes se han producido más por el número de enemigos que por otra cosa, y es algo que desluce el resultado final.

Sin embargo. Star Wars Outlaws es un juego totalmente recomendado no solamente para los amantes de la franquicia, sino también para cualquiera que quiera robar su propia nave y disfrutar de un universo tan lleno de vida, como de bandidos dispuestos a acabar con nosotros.