ASUS ROG Phone 8, review completa en español

Volvemos a contar con un smartphone al más puro estilo gaming bajo la firma de ROG aunque, en esta ocasión, ROG ha lanzado dos modelos este año con esta misma premisa y diferencias entre ellos siendo hoy el ASUS ROG Phone 8 el modelo analizado y, más adelante, hablaremos de su hermano Pro. En esta generación de ROG Phone ASUS ha querido desmarcarse de sus predecesores puesto que, en esta generación, no solo estamos ante un teléfono para videojuegos sino que, además, estamos ante un teléfono premium para uso diario.

Antes de comenzar, queremos agradecer a ASUS ROG el préstamo de la unidad para la realización de la review

El ASUS ROG Phone 8

Comenzamos la review con las claves de diseño de este nuevo ASUS ROG Phone 8, en el que se ha dejado atrás la estridencia del gaming puro y duro y se ha optado por una estética más propia de un gama alta «convencional» con algunos toques gaming, como el logotipo de ROG con retroiluminación de la trasera. Además, en esta trasera encontramos un doble acabado dentro del mismo color, disponible en phantom black o rebel gray, separados mediante una línea diagonal un poco más abajo del módulo de cámaras. El teléfono es mucho más delgado que en la generación anterior (163.8 x 76.8 x 8.9mm y 225g), más propio de un buque insignia «normal» que de un móvil gaming, y cuenta con una muy buena ubicación de la botonera para facilitar el acceso a los mismos a una mano, un trabajo nada desdeñable en un smartphone de semejante diagonal. Además de la reducción de grosor, se ha realizado un trabajo de diseño mucho más refinado con los bordes y la botonera para darle un toque mucho más refinado y premium y que case así con la nueva idea de smartphone «premium para uso diario y juegos» que caracteriza a esta nueva generación de ROG Phone. Pero si hay algo que conserva de las anteriores generaciones es la implementación de un doble puerto Type C, algo indispensable tanto para poder cargar el smartphone mientras jugamos en horizontal de forma más cómoda (y seguir usando sus gatillos hápticos) como para usar el AeroActive Cooler X.

Y ya que mencionamos la iluminación de la trasera destacar que podremos personalizarla para diferentes modos:

• Llamada entrante
• Modo botón (que se encienda al pulsar los AirTrigger/Gatillos hápticos)
• Música
• Modo X
• Notificación
• Cargando
• Pantalla encendida
• Pantalla apagada
• Asus Rog

También podremos configurar el LED para que vaya cambiando de color según la temperatura del smartphone, aunque no lo veamos mientras jugamos, siendo el modo más útil (además el puramente estético) como LED de notificaciones.

Pasamos a hablar de especificaciones técnicas, donde encontramos el procesador Qualcomm Snapdragon 8 Gen 3 capaz de alcanzar los 3,3Ghz y con la GPU Adreno 750, un 25% más rápida que su predecesora, estando disponible con 16 Gb de RAM y 512 Gb de memoria interna. Pero la potencia sin refrigeración no sirve de nada, y en ROG son muy conscientes de ello desde el ROG Phone 6, modelo desde el que ROG centralizó el SoC y usaron nitruro de boro para una mejor refrigeración. En el ROG Phone 7 se rediseñó la solución térmica para evacuar el calor por convección, implementando los disipadores activos. En este modelo se ha optado por un diseño IP68, por lo que la solución de convección ya no es compatible con este nuevo diseño por lo que se ha añadido un Rapid Cooling Conductor (un heatpipe de cobre) para trasladar el calor del SOC a la cubierta trasera de forma casi instantánea y más eficiente. Obviamente, si sobre esta trasera instalamos el Aero Active Cooler mejoraremos un 20% la eficiencia térmica del sistema, con un diseño más liviano y más eficiente para obtener la mejor refrigeración. Rematamos el apartado técnico con conectividad 5G, WiFi 7 y Bluetooth 5.3 así como una batería de 5500 mAh con carga rápida de 65W y carga inalámbrica de 15W. Os dejamos los tests sintéticos tanto de rendimiento como de autonomía.

Pasamos a hablar de pantalla, donde contamos con una panel LTPO AMOLED de 6,8 pulgadas con resolución Full HD+, brillo de hasta 2.500 nits y 165 Hz, contando con una relación panel cuerpo del 94%, algo que hace que el panel parezca aún más grande. El panel admite frecuencias de actualización adaptativas para que no drene la batería pudiéndose seleccionar los 165 Hz para disfrutar de toda la fluidez del panel en gaming, contando con un muestreo táctil de 720 Hz para obtener la mejor respuesta jugando. En lo referente a la experiencia de uso del panel está bastante bien, aunque quizás esperábamos algo más de resolución en un smartphone gaming, pero cuenta con un brillo más que sobresaliente y una precisión del color extraordinaria contando además con la protección Gorilla Glass Vitus 2 para ofrecer la mayor resistencia y varios modos de protección ocular.

Pasamos al apartado de audio donde encontramos un doble altavoz estéreo bastante potente. Además, el smartphone implementa Dirac Virtuo para auriculares, que lleva el sonido espacial a todos tus auriculares (con cable, Bluetooth o USB-C) para que puedas disfrutar de una experiencia de cine cuando juegues, veas películas o escuches música. También cuenta con la más reciente tecnología de cancelación de ruido vía inteligencia artificial, que elimina el ruido de fondo al instante para que tu voz suene con total claridad. Por último, también admite Qualcomm aptX Adaptive y aptX Lossless para garantizar un audio Bluetooth de alta fidelidad y latencia superbaja.

Pasamos a hablar del apartado fotográfico donde encontramos una cámara frontal de 32 MP y una trasera de 50 MP con Gimbal OIS acompañada de un ultra gran angular de 13 MP y un tele 3X de 32 MP. El sensor principal es el Sony IMX890, un sensor más que resolutivo en muchos buques insignia recientes ofreciendo unas fotografías notables con un poco de saturación de color, algo habitual en muchos smartphones para hacerlas más resultonas. Destaca el trabajo en HDR y el control de los contrastes de iluminación. El modo retrato está bastante bien, con un pequeño efecto acuarela pero un resultado sobresaliente si no ampliamos demasiado para dejar al descubierto pequeños errores de recorte en el bokeh. El gran angular y el zoom ofrecen un rendimiento más que bueno, mejor incluso que en otros gama alta que suelen descuidar este tipo de objetivos. La cámara selfie ofrece un muy buen resultado tanto a nivel color como iluminación. Pero sin duda donde el terminal saca pecho es en la grabación de vídeo, con un muy buen estabilizador en 4K y la posibilidad de grabar en 8K a 24 FPS, aunque no es el modo que más recomendemos.

Experiencia de uso y conclusiones

Volvemos a contar con un smartphone que despunta en rendimiento, audio, conectividad y pantalla contando, además, con varias opciones como los gatillos hápticos o un software enfocado al gaming más puro y duro que lo hacen idóneo para los más jugones, así como para los que disfrutan de contenido multimedia en cantidades ingentes en su smartphone. Esto se ve reforzado por una autonomía brutal y un sistema de carga rápida infalible. El punto flaco de este ASUS ROG Phone 8 continúa siendo el apartado fotográfico, que no el de grabación de vídeo con su magnífico estabilizador, no obstante es un apartado mucho más cuidado que en generaciones anteriores y que llega a ser bastante solvente. Esta mejora fotográfica, y más aún en el apartado de vídeo, acompañada de una estética mucho más apta para todos los públicos casa mejor con esa nueva premisa de smartphone premium para uso diario y también para juegos aunque, bajo nuestro punto de vista, aún le falta una vuelta de tuerca a las cámaras. En el resto de apartados estamos ante un smartphone simplemente sobresaliente, más que idóneo para un uso diario en el que la fotografía no sea el principal uso que demos al terminal móvil y en el que tanto el rendimiento como el audio, la autonomía y el panel gocen de un mayor protagonismo en nuestro día a día.

Por todo esto, otorgamos los galardones de Diseño, Producto Premium, Producto Recomendado y Calidad Precio de GameIt al ASUS ROG Phone 8