Atelier esta de vuelta. Quizás gran parte del publico desconozca la existencia de esta franquicia, pero lo cierto es que esta entrega supone la número 19 de una saga que parece un tanto estancada desde hace algunos años.
Gust, desarrolladores y creadores de la IP, vuelven con un nuevo episodio protagonizado en esta ocasión por dos chicas: Lydie y Suelle. Gracias a Koch Media nos hemos podido poner en la piel de estas dos jóvenes a las que tendremos que ayudar para cumplir su ambicioso sueño de convertir un pequeño taller de alquimia en el más famoso del reino de Adalet. El juego ha sido estrenado a finales del mes pasado para las plataformas PS4, PC, PS Vita y Nintendo Switch, la cual hemos podido disfrutar.
Dos alquimistas y unos cuadros misteriosos
Atelier Lydie & Suelle: The Alchemists and the Mysterious Paintings es un juego de rol JRPG en el que aparte de combatir contra monstruos y mejorar a nuestros personajes deberemos trabajar para hacer crecer nuestro negocio, en este caso, un taller de alquimia. Dirigir el taller no será tan complejo como en otros juegos enfocados en la gestión, pero supondrá una parte importante (si no la que más) para el desarrollo de la aventura.
Inicialmente deberemos centrarnos en completar los diferentes encargos que obtendremos en el tablón de anuncios del pueblo. Estos encargos por lo general se basarán en derrotar enemigos, recolectar materiales o elaborar diferentes pócimas u objetos en nuestro caldero mágico. La elaboración de objetos mediante alquimia se presenta como la base más interesante del título, siendo necesario que prestemos atención a los tutoriales que nos enseñan a fabricar lo que deseemos con la mayor efectividad y calidad posible. Resumiendo un poco el proceso, craftear un objeto requiere una adecuada selección de materiales posterior a la selección de la receta, así después posicionaremos dichos materiales correctamente dentro de una especie de “plano” donde podremos alterar o mejorar los diferentes efectos de los materiales que estemos utilizando para la receta.
Puede sonar complicado, pero lo cierto es que resulta bastante mas sencillo de lo que parece. Atelier no es un juego de rol excesivamente complicado, no es un juego de gestión en el que nos vayamos a perder en sus abundantes menús, más bien es un mix ligero de ambos conceptos a los que se añade la importante presencia del argumento.
La historia jugará un papel muy importante dentro del título, aunque tampoco podemos destacarla con respecto a otros JRPG coetáneos. El juego comienza presentándonos a dos hermanas que viven con su padre en la gran ciudad regentando un pequeño taller de alquimia. Tras conocerlas un poco a ambas y a su despistado padre, se nos irán presentando a diferentes personalidades del pueblo, entre ellas a nuestra rival del taller mas lujoso de la ciudad (Lucia), a nuestra mentora en la profesión de alquimistas (Ilmeria), o la dependienta de la asociación de alquimistas (Meryvelle). Esta última nos presentará dará la posibilidad de inscribir nuestro taller en la asociación, momento en el que deberemos empezar a trabajar para aumentar nuestro rango y hacer crecer nuestra popularidad en la ciudad.
Completar exámenes, sintetizar objetos y seguir cumpliendo encargos que nos ayuden a crecer más y más serán la clave para avanzar en el juego… Aunque como diría la maestra Ilmeria, un alquimista también debe aprender a salir de los problemas luchando.
La lucha es una parte importante del juego. El combate utilizado es el clásico por turnos, en el que según se vaya desarrollando la pelea, deberemos seleccionar que ataque/skill deseamos ejecutar con cada uno de nuestros personajes. Pese a que en un principio solo contaremos con Lydie y Suelle, durante la aventura conoceremos a más amigos que se unirán a la causa. Los escenarios a recorrer serán los clásicos de otros títulos de la saga: bosques, ensenadas, llanuras, etc… aunque esta vez se añade un toque fantasía que aporta algo de frescura al título. El subtítulo “The alchemists and the mysterious paintings” no viene dado por casualidad, y es que en esta ocasión tendremos la posibilidad de adentrarnos en diferentes mundos de fantasía a través de ciertos cuadros pintados en distintos lugares de la ciudad (al más puro estilo Super Mario 64), los cuales nos muestran ambientaciones mas surrealistas como jardines celestiales o bosques encantados.
Los enemigos no son abundantes y podremos darles esquinazo, aunque por supuesto se nos obligara a combatir en mas de una ocasión y obviamente muchas de ellas serán para avanzar en la aventura.
Ocultar deficiencias también es arte
Dando por hecho que el juego goza de unas características jugables bastante llamativas (aunque no demasiado profundas), toca repasar sus fortalezas y deficiencias en el apartado audiovisual.
En primer lugar es de recibo señalar que el juego de Gust cuenta con un apartado artístico de buen nivel que es capaz de enmascarar muchas de las carencias gráficas del juego. Similar a los anteriores y con el estilo anime característico de la saga, artísticamente no hay demasiado que reprochar al título. Los personajes están bien elaborados, cuentan con modelados bastante diferentes que además resultan ser bastante cuquis y estilizados.
Los problemas vienen cuando hablamos del apartado técnico, el cual se ha visto muy poco mejorado con respecto a lo visto en entregas anteriores y que además llega un tanto capado a Nintendo Switch. Las texturas se perciben borrosas, recordando mucho a los fallos que comentamos en su momento en Xenoblade Chronicles 2 al jugar en modo portátil, aunque en esta ocasión el problema se traslada también al modo Dock. No nos extraña que el juego llegue a 30 fps a la consola de Nintendo (aunque su apartado gráfico no lo justifique para nada) pero lo que si nos ha extrañado es que las demás versiones de consola también han llegado con la misma tasa de frame-rate (PS4 y PS4 Pro). Sabemos que el músculo técnico no es uno de los fuertes de este estudio, pero al igual que hacemos con otras sagas, si la franquicia esta haciendo llegar juego por año a las tiendas lo justo es pedir algún tipo de mejora en este aspecto.
Otro detalle que tampoco nos acaba de convencer es que existe un popping brutal en cualquiera de los escenarios (ciudad, bosques, cuadros e incluso nuestro propio taller) lo que hace que nos preguntemos hasta que punto ha sido trabajada esta versión de Switch con respecto al resto.
En última instancia toca señalar que la banda sonora cumple de manera innegable. Los temas del título se mezclan con el de la anterior protagonista (Firis) y cambian según cual de las dos gemelas estemos controlando en ese momento. Por otro lado hay que destacar que el juego ha llegado en completo inglés a nuestro país con la posibilidad de escuchar las voces dobladas en un único idioma: japonés. Este detalle puede resultar crucial para muchas personas a la hora de darle o no una oportunidad que, en el caso de haber llegado por lo menos traducido a nuestro idioma, seguramente se hubiera merecido.
Conclusiones de Atelier Lydie & Suelle: The alchemists and the mysterious paintings
La nueva entrega de Atelier me ha pillado desprevenido. Personalmente nunca he sido un excelso jugador de la saga, pero desde luego este último título me ha fascinado por su variedad de mecánicas y propuestas. Siendo un juego muy ligero en todos sus aspectos, se agradece jugar de vez en cuando a este tipo de obras con ese inherente buen rollo entre sus personajes y repleto de situaciones típicas de cualquier anime adolescente. Como nota negativa, es justo recalcar que el juego no cumple con el estándar gráfico y técnico de Nintendo Switch, a lo que tampoco ayuda su llegada en completo inglés y sin posibilidad de cambiar el doblaje a otra voz fuera del japonés. Un título que agradará a los mas fans y que podría llegar a conquistar a los neófitos que decidan entrar con un buen nivel de inglés.
https://www.youtube.com/watch?v=FmXzlqAwa18