Bayonetta & Vanquish 10th Anniversary Bundle. Análisis Xbox One

En la pasada generación de consolas, hubo algunos juegos que dejaron muy buen recuerdo en la memoria de los aficionados. Títulos como Dead Space, Uncharted, Gears of War o Mass Effect son buenos ejemplos de producciones que consiguieron encandilar al público. Aunque varios de ellos ya han llegado a Xbox One y PlayStation 4 en forma de recopilatorio, o a través de la retrocompatibilidad, no todos han corrido la misma suerte. Por fortuna, con el lanzamiento de Bayonetta & Vanquish 10th Anniversary Bundle, Sega ha decidido traer de vuelta dos destacados videojuegos del catálogo de PlatinumGames a las actuales máquinas de Microsoft y Sony.

Esta adaptación, realizada por Armature Studio, cuenta con algunas mejoras visuales que dotan a ambos títulos de una mayor tasa de imágenes por segundo y una mejor resolución. Las versiones para Xbox One X y PlayStation 4 Pro son las que salen mejor paradas, ya que alcanzan 4K y 60fps. Las versiones para los modelos estándar de Xbox One y PlayStation 4 mantienen los 60 frames por segundo, pero reducen su resolución máxima hasta 1080p —full HD—. Todo esto se traduce en una imagen nítida y una fluidez encomiable, algo que agradecen sobremanera debido a su gameplay rápido y frenético.

Bayonetta

Aunque ambas producciones comparten el gusto por la acción desenfrenada, lo cierto es que presentan propuestas con un enfoque diferente. Bajo mi punto de vista, el principal atractivo de esta remasterización lo encontramos en Bayonetta, un hack and slash dirigido por el diseñador japonés Hideki Kamiya, que originalmente fue lanzado para Xbox 360 y PlayStation 3 en enero de 2010. En él tomamos el control de Bayonetta, una sensual bruja de Umbra que mantiene una interminable batalla contra los ejércitos celestiales. En su momento, este título llamó mucho la atención por contar con un apartado artístico muy llamativo, además del atrevimiento y descaro con el que la protagonista despacha a sus adversarios.

Su sistema de combate es similar al usado en la serie Devil May Cry. Esto significa que debemos abrirnos paso por escenarios lineales, derrotando a los enemigos a base de combinar la fuerza de nuestros puños con armas de fuego. Su cualidad más característica reside en el «tiempo brujo», una habilidad que se activa de forma automática cuando esquivamos una embestida rival justo antes de que impacte. Esto nos permite ralentizar a los oponentes durante unos valiosos segundos, dándonos la oportunidad de descargar una lluvia de golpes sobre los adversarios sin apenas oposición.

Debo confesar que, en mi opinión, Bayonetta 2 está varios peldaños por encima, tanto en el plano técnico como en su apartado jugable, pero esta primera entrega ya contaba con ese gameplay tan elegante y refinado que ha caracterizado a la franquicia desde sus inicios. La narrativa, por su parte, está plagada de situaciones surrealistas hasta decir basta, con momentos tan icónicos como cuando Bayonetta se disfraza con un atuendo de monja en un falso funeral, para atraer a un grupo de criaturas celestiales hasta ella.

Vanquish

Lanzado en octubre de 2010 para Xbox 360 y PlayStation 3, bajo la dirección del creativo japonés Shinji Mikami, Vanquish supuso una vuelta de tuerca más para los shooters con coberturas. Aunque en un primer momento puede dar la sensación que estamos ante un juego de disparos genérico, lo cierto es que sus desarrolladores incluyeron algunos elementos novedosos a la fórmula clásica, que dotaban a sus escenas de acción de un ritmo muy elevado. Bajo esa apariencia futurista, se escondía un título frenético que convirtió la velocidad en su principal virtud.

Esto es posible gracias a una de las funciones que lleva equipada la armadura del protagonista, con la que podemos desplazarnos por los escenarios a velocidades de vértigo: el «deslizamiento a propulsión». Con solo pulsar uno de los botones del mando, activaremos el reactor que se encuentra en la espalda de nuestro personaje, el cual nos permite movernos con una increíble rapidez. Su uso es limitado, pues cada vez que se enciende elevamos la temperatura del traje, así que conviene vigilar que no se sobrecaliente y nos deje indefensos en medio de un tiroteo.

Si recibimos daños críticos, entraremos de forma automática en el denominado «modo AR». Al hacerlo, la acción se verá ralentizada por unos instantes, lo que nos dará la oportunidad de buscar un lugar seguro en el que ponernos a salvo. Además, también es posible hacer uso de esta función de forma manual, algo que viene de perlas a la hora de apuntar con precisión, o cuando nos vemos abrumados por la potencia de fuego de los enemigos.

Conclusiones Bayonetta & Vanquish 10th Anniversary Bundle

Aunque ya han pasado 10 años desde que se lanzaron de forma oficial en Xbox 360 y PlayStation 3, la propuesta que presentaron ambos títulos hace una década sigue vigente a día de hoy. Además, debo decir que su gameplay ha envejecido sorprendentemente bien, manteniendo intactas todas sus virtudes. Es cierto que este recopilatorio podría haber sido todavía mejor, si se hubiera aprovechado la ocasión para incluir material inédito o algún tipo de contenido que hiciera más longeva la experiencia.

Sin embargo, poco se le puede reprochar a Armature Studio, pues el trabajo de adaptación que han realizado en materia visual, para adecuar ambos juegos a los estándares visuales de la actual generación de consolas, es absolutamente intachable. Bayonetta & Vanquish 10th Anniversary Bundle es una magnífica remasterización de dos grandes obras de PlatinumGames, que todavía hoy siguen brillando con luz propia.

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Nota: 8