Be Quiet Shadow Rock Slim 2 review y unboxing en español

Metidos en plena temporada estival nos damos cuenta de que el rendimiento térmico de nuestro PC no es lo que debería, y precisamente por eso analizamos la última joyita de Be Quiet, una marca que ha demostrado de sobremanera las bondades de sus disipadores generando un ruido ínfimo: el Shadow Rock Slim 2. El disipador se nos presenta como una solución con un rendimiento muy alto encapsulado en un diseño compacto y funcionamiento silencioso.

Antes de comenzar, agradecemos a Be Quiet la cesión del producto para la realización de la review.

El Be Quiet Shadow Rock Slim 2

Comenzamos repasando las características principales del disipador, dotado de un montaje optimizado para una instalación más sencilla y facilitar la alineación del disipador con el flujo de aire de nuestro chasis. El Shadow Rock Slim 2 cuenta con cuatro heatpipes de 6 mm con diseño Heat Pipe Direct Touch (HDT) para una transferencia de calor eficiente desde el zócalo de la CPU a la torre del disipador, consiguiendo un rendimiento de refrigeración de hasta 160W de TDP y con un ruido máximo de 23,7 dBA.

El disipador cuenta con un rendimiento compacto de 74 x 137 x 161 mm y un peso de 685 gramos, dejando suficiente espacio para total compatibilidad con los módulos de RAM incluso en los montajes más compactos. La torre cuenta con un diseño estéticamente agradable y un remate en su cubierta superior en aluminio cepillado que le confiere un upgrade estético con respecto a su predecesor.

El ventilador, un Silent Wings 3, cuenta con un diámetro de 135 mm pudiendo alcanzar las 1400 rpm generando un ruido máximo de 23.7dbA y contando con un total de 9 aspas diseñadas para maximizar el airflow y la presión estática generando un ruido mínimo y contando con un rodamiento de rifle (o de ranuras) para maximizar la durabilidad del mismo. Además, os recordamos que los ventiladores Silent Wings destacan por su tecnología vanguardista, su funcionamiento prácticamente inaudible y su gran capacidad de refrigeración. La tercera generación de esta galardonada serie de ventiladores ofrece un rendimiento excelente, con un motor de ventilador de 6 polos con funcionamiento suave para mejorar su estabilidad y reducir las vibraciones, un soporte dinámico con líquido, un diseño de aleta único con flujo de aire optimizado y un armazón con entradas de aire en forma de embudo para maximizar el flujo de aire y evitar cualquier turbulencia que empañe su rendimiento.

Equipo de pruebas y tests

Dicho todo esto procedemos a montar el disipador en el siguiente equipo de pruebas

• Fuente de Alimentación Fractal Design Ion Gold 850W
• Placa Base NZXT N7 Z590
• Tarjeta Gráfica Gigabyte RTX 3060 Gaming OC
• Procesador Intel 10600K

Tras esto, estresamos el equipo usando el software Aida 64 obteniendo los siguientes resultados

Como podéis ver, y en unas condiciones bastante adversas (30ºC de temperatura ambiente), el disipador se defiende como un auténtico león manteniendo bien a raya las temperaturas del procesador bajo estrés y con una sonoridad ínfima, totalmente inaudible en un chasis cerrado.

Experiencia de uso y conclusiones

La verdad es que nos estamos acostumbrando a lo bueno con Be Quiet, y es que sus sistemas de refrigeración ofrecen un rendimiento excelente con una sonoridad ínfima y este último disipador no es ninguna excepción. Y es que el Be Quiet Shadow Rock Slim 2 es un disipador compacto, con la mayor compatibilidad y muy asequible que, además, ofrece una refrigeración brutal con una sonoridad ínfima. Obviamente, debido a su tamaño, no podemos intentar refrigerar procesadores con TDP excesivamente elevado y que superen la recomendación del fabricante, pero sí que es una opción ideal para refrigerar un gran número de equipos con un presupuesto ajustado y que no quieran tener el sonido de un reactor en su escritorio.

Por todo esto, otorgamos los galardones de Prestaciones, Producto Recomendado y Calidad Precio de Game It al Be Quiet Shadow Rock Slim 2