Metro Exodus Enhanced Edition. Análisis Xbox Series X

Han pasado ya más de dos años desde que se lanzó la tercera entrega de la saga Metro. A pesar de las muchas cosas bien que hacía ya en 2019 Metro Exodus, lo que más ruido hizo fue del juego de 4A Games fue la inusual cantidad de bugs y fallos que presentaba. La experiencia era bastante inestable incluso en los ordenadores de alta gama. Parece que todo esto se ha solucionado ya en esta Enhanced Edition. Os contamos como les ha sentado el salto a las nuevas consolas a los túneles del metro ruso.

El ansia por salir a la superficie

La principal novedad que nos trae este Metro Exodus es la posibilidad de salir a la superficie. Tras años viviendo entre los peligros de los túneles subterráneos, surge la necesidad de alcanzar la superficie. Y es aquí donde Aparecen tanto las mayores luces como sombras de esta tercera entrega.

Salir a la superficie nos ofrece escenarios mucho más abiertos, una mayor libertad a la hora de afrontar los tiroteos y como gestionar los escasos recursos que nos facilita el juego. Pero esta novedad de Metro Exodus también tiene una parte negativa. Por otro lado, en 2033 y en Last Light los escenarios estaban diseñados de una manera más lineal, lo que facilitaba que la narrativa avanzase de una manera más fluida. Esto provoca que la historia se vea algo resentida en este Metro Exodus, sobre todo en su ritmo. Este problema coge mayor magnitud si tenemos en cuenta que se trata de una saga de shooter que se diferencia del resto por el peso de la historia que cuenta.

Por supuesto, esta Enhanced Edition incluye también los dos DLCs que se pusieron a la venta tras el lanzamiento del juego. Aunque no son esenciales para ponerle un broche a la historia sí que darán ese extra a aquellos jugadores que se hayan quedado con ganas de más tras superar la historia de Metro Exodus.

Más grande, pero la misma esencia

Para los que hayáis leído las novelas de Glujovski, el tono de los videojuegos os parecerá un poco menos pesimista y oscuro. A pesar de esto, esa atmósfera es uno de los aspectos más reconocible de la trilogía de 4A Games. El aumento de tamaño en los escenarios de Metro Exodus es palpable, pero a pesar de esto, ha sabido llevarnos a lugares pequeños y cerrados en momentos concretos que nos impiden deshacernos de esas sensaciones de agobio que tan bien genera la saga.

A generar estos momentos ayuda y mucho la escasez de recursos. Tendremos que ser conscientes en cada momento de cuantas balas tenemos, el estado de nuestras armas o si tenemos botiquines. Como sucede en otros muchos títulos del género, estamos ante un shooter en el que tendremos que disparar lo menos posible.

A nivel jugable, podemos decir que a excepción de los grandes mapas que ya hemos comentado, que nos abren un abanico de posibilidades en cada momento, tanto la jugabilidad como la ambientación son bastante continuistas con lo que ofrecían las dos primeras entregas. Esto no es algo que podamos catalogar como malo ya que, con el paso del tiempo, la franquicia ha ido convirtiéndose en un referente entre los juegos que mezclan el survival con los shooter en primera persona.

El salto a la nueva generación de Metro Exodus

Pero más allá de todo lo que ya hemos comentado sobre Metro Exodus, la principal novedad de esta Enhanced Edition se encuentra en su apartado técnico. El primer punto positivo es que parece que han desaparecido la mayoría de los bugs que se encontraban en la primera versión del juego. Es cierto que siguen estando presentes algunos fallos como personajes incrustados en paredes, pero es algo mucho más residual.

La principal diferencia la encontramos, como no puede ser de otra forma, en los tiempos de carga. Ya empezamos a acostumbrarnos a la velocidad de los discos duros sólidos y revisitar títulos de la pasada generación empieza a ser doloroso. En este caso entraremos en acción en unos pocos segundos.

Pero no nos olvidamos de lo visual. Es evidente el uso que hace Metro Exodus Enhanced Edition de la potencia de las nuevas consolas, en este caso la Xbox Series X. El Ray Tracing está presente y se nota desde el minuto uno gracias a los escenarios tan oscuros. La refracción de la luz gana mucho peso dando un volumen a los escenarios que no tenía en su primera versión.

Si tenemos que poner un pero en lo técnico es que la IA de los enemigos sigue siendo algo escueta, lo que nos permite pasearnos muy cerca de ellos sin que se percaten de nuestra presencia.

Conclusiones de Metro Exodus Enhanced Edition

Nos acercamos al primer año de las nuevas consolas y estas versiones vitaminadas de juegos lanzados hace un par de años siguen siendo una constante ante la falta de nuevos lanzamientos. En esta ocasión las novedades son bastante escasas. Se incluyen las dos expansiones estrenadas tras el lanzamiento y se mejoran algunos aspectos del apartado técnico.

Es cierto que el Ray Tracing le da un buen empujón en lo visual a Metro Exodus, pero se mantienen los problemas de la inteligencia artificial. A pesar de que no trae demasiadas novedades, Metro Exodus no deja de ser un buen juego. Por este motivo, y a pesar de ser el discurso habitual, tenemos que decir que esta Enhanced Edition es ideal si todavía no lo habéis disfrutado, pero da pocos motivos para comprarlo si ya tenemos la versión de Xbox One o Playstation 4.