Acaba el verano, empieza el otoño y es momento de renovar tu versión de videojuego de fútbol. Hasta aquí, todos los aficionados al deporte rey a través de la consola están de acuerdo. Las dudas llegan cuando toca elegir. ¿FIFA o PES? La decisión no es fácil porque tanto EA Sports como Komani se esmeran, año a año, por mantener su habitual legión de fieles y reclutar, si es posible, a alguno del otro bando. No obstante, para muchos no existe el debate porque el amor por una saga es equiparable al de unos colores y el cambio de equipo no es una opción como tampoco el de videojuego.
Sea como fuere, conviene saber las virtudes y defectos de cada uno de ellos. En el tema de las licencias no hubo nunca discusión. Si lo de las licencias es para ti sagrado, el FIFA era y debe seguir siendo tu elección. En este aspecto, no hay comparación posible porque EA Sports no duda en invertir una buena suma de dinero por contar con los nombres oficiales de los equipos y de sus jugadores. Muy distinta es la política del PES, que sigue dejando en manos del usuario la posibilidad de completar este vacío con descargas vía internet. Este defecto para algunos es para otros un entretenimiento más que permite personalizar el juego.
Khedira critica su rostro en el FIFA
Hay similitudes faciales a partes iguales, así como parecidos poco razonables con los futbolistas. Por ejemplo, un usuario publicó las enormes diferencias entre uno y otro juego a la hora de retratar al vestuario del Atlético de Madrid, que en esta versión es más candidato a ganar algún título del fútbol español, como se puede ver aquí como más detalle, ante el mayor coeficiente de la plantilla, en donde destaca por encima del resto Antoine Griezmann ante su cada vez mayor fiabilidad de cara a puerta. De momento, no sabemos si los rojiblancos están contentos con sus retratos. El que no lo está es el alemán Sami Khedira, quien no ha dudado en hacer público su malestar por el rostro que le ha asignado el FIFA. Las quejas, de hecho, desataron en las redes la ‘guerra’ deportiva entre los partidarios de uno y de otro videojuego.
En cuanto a la jugabilidad, las diferencias son también notables. FIFA, fiel a la tradición, apuesta por un fútbol que se aleja del real una vez que el jugador adquiere cierto nivel. Y es que es posible convertir a más de un desconocido en el nuevo Messi ante la amplia variedad de controles y regates que hay. En cambio, el PES exige de un mayor aprendizaje y dominio del balón para dar continuidad a la jugada, de ahí que los resultados al final de un partido suelan ser menos abultados. Además, en su última versión se han esmerado porque la figura del portero no sea meramente decorativa. El arquero es más parte del juego y de la misma forma que se hace una palomita de póster te puede fallar con una cantada propia de la de Arconada en la final de la Eurocopa de 1984.
A nivel general, el FIFA ha sido en los últimos tiempos el juego a batir, pero no se puede descuidar porque Konami está cada vez más cerca. De hecho, en un mercado referencia como el japonés lideró las ventas en el mes de septiembre.