E.T. Armies. Análisis PC

E.T. Armies es un FPS lanzado por Raspina Studio, pura ciencia ficción que por fin se puede disfrutar fuera de Irán y que ha dejado un buen sabor de boca con este videojuego en primera persona que llega por fin a Europa para PC. A pesar de que pueda parecer un título con un cierto aire clásico, E.T. Armies cuenta con detalles actuales que nos permite disfrutar de él.

Si olvidas a alguien, su venganza puede ser terrible

De las dos opciones que brinda E.T. Armies, una es el modo campaña, con una duración entre tres y cuatro horas. La trama del videojuego comienza con un clásico, la evacuación prácticamente completa de la Tierra. Por desgracia, no todos pueden abandonarla en busca de recursos y un lugar mejor al que llamar “hogar”, por ello, hay un grupo que se queda en la Tierra intentando sobrevivir día a día, luchando por lo único que le queda, su propia vida. Dicho suceso crea una oleada de rencor y odio que se convierten poco a poco en puro deseo de venganza por parte de los que se han quedado olvidados en tan devastado lugar. Finalmente, la idea arraiga en sus mentes: atacar a aquellos que un día les abandonaron a su suerte.

A partir de ese momento, nos meteremos en la piel de un miembro de las Fuerzas Extraterrestres para defender a los Parsis, aquellos que dejaron abandonados a unos cuantos en La Tierra, llamados los Forsaken, y que buscan reparar el daño a su honor y por ende, de la masacre que conlleva un ataque de semejante calibre.

¿Defensor o atacante?

La segunda opción y a la que parece destinada este videojuego es el modo online, siendo la elección más entretenida. Lo primero que ofrece el multijugador es la capacidad de unirse a un servidor o crear uno propio teniendo en cuenta que, de unirse el jugador a uno, verá el punto en el cual se está desarrollando la aventura, el número de jugadores, e incluso el modo de juego.

Una vez escogido el servidor, E.T. Armies ofrece la opción de integrarse en uno de los dos bandos: los Parsis (en azul) o los Forsaken (en rojo) y acto seguido se seleccionan las armas.

Otra de las diferencias entre el modo campaña y el on line multijugador son los combates cuerpo a cuerpo. En este modo se necesitan reflejos e ingenio para sobrevivir a los enemigos; en contraposición, no existe cuerpo a cuerpo en el modo campaña además de la variabilidad de enfrentamiento en la dificultad escogida para probar los reflejos de uno mismo.

Un conjunto en buenas condiciones

Una vez analizados ambos modos de juego, le llega el turno al apartado gráfico y la banda sonora. Al primero no le falta detalle alguno en cuanto al entorno y el jugador puede disfrutar de cada una de las ambientaciones sin tener reparos, tanto en interiores como en exteriores; al único punto en el cual le falta un poco de realismo, es al sonido del disparo una vez impacta enemigo, no obstante, el movimiento de los personajes es bastante bueno y las caídas tras un disparo certero también.

Las teclas a utilizar son básicamente las mismas que en cualquier otro juego de este estilo, siendo el ratón necesario para apuntar, cambiar de arma y disparar, las tan gastadas teclas WASD para moverse, E para para mantener contacto con otros jugadores y R para recargar; sencillo y básico.

En cuanto al sonido, la BSO es perfecta, no se hace monótona y sumerge al jugador aún más en cada batalla, el modo en el cual envuelven tanto el ambiento como la BSO y los movimientos es espectacular.

Por último, un detalle al que le falta un poco de pulido son las traducciones; en español, la traducción necesita un poco de mejora; sin embargo, al ser más intuitivo se pueden comprender detalles o acciones y avanzar sin demasiados problemas en el modo campaña. Por otra parte, el modo online es más directo y se ajusta a los parámetros básicos actuales de cualquier shooter a la hora de enfrentarse a otros jugadores.

Conclusiones de E.T. Armies

E.T. Armies no es un mal título cuyo punto fuerte será el modo multijugador una vez se comiencen a llenar los servidores. Resultará más entretenido en este aspecto que en el modo campaña; no obstante, es un juego al que se le pueden sacar horas jugando unos contra otros.