James DeMonaco vuelve a escribir y dirigir la tercera entrega de la saga The Purge o La Purga como llegó aquí a España. Unas películas donde una noche al año, se puede cometer cualquier tipo de delito, bajo unas normas implantadas por el nuevo gobierno de Estados Unidos. Nuevamente cuenta en el reparto con Frank Grillo, que fue el protagonista de la anterior entrega y cuenta con una nueva incorporación, Elizabeth Mitchell, que la hemos podido ver en otras películas como Frequency. En esta ocasión, La Purga, da un paso más allá de lo visto en las anteriores entregas, donde una de las normas se elimina, la que protege a cualquier persona que tenga un nivel 10 de prioridad. ¿Qué significa esto? Que todos los políticos también pueden ser asesinados y no están protegidos bajo ningún concepto.
Esta norma revocada en esta entrega, suma un nuevo interés a todos los que hemos disfrutado de las anteriores películas, en mayor o menor medida, ya que no sólo la gente de a pie sufrirá las consecuencias que trae esta noche, esperada por muchos y angustiosa para otros. Pero, ¿esto es suficiente para que la idea de esta saga funcione mejor que en las otras entregas? Hoy os diremos si es así o no.
La saga La Purga siempre ha interesado por tener una idea plasmada en su argumento bastante atractiva y aunque suene a sádico, es la idea de que una noche al año se puedan cometer delitos incluido el asesinato. Es la verdad, es el atractivo y lo que atrae a la gente a ver estas películas de James DeMonaco. Además que en esta ocasión no se salvan ni los políticos, es como abrir una vía libre al caos y una guerra urbana como nunca podríamos imaginar. Hay un momento de la película, que no voy a desvelar para no fastidiaros la sorpresa, que me hizo mucha gracia y creo que fue una buena jugada por parte del director, si estáis atentos seguro que lo cogeréis al vuelo.
Frank Grillo ahora como guardaespaldas de Elizabeth Mitchell, que interpreta a la senadora Charlie Roan, intentará protegerla cueste lo que cueste ya que quiere acabar con la Purga anual. Ya creo que vais entendiendo por qué se revoca esa ley que protegen a altos cargos. Como iba diciendo Grillo actúa parecido a lo que vimos en la entrega anterior, un hombre muy preparado que hará todo lo posible para cumplir su objetivo. Mitchell, que interpreta a la senadora y candidata a la presidencia, que quiere acabar con esa noche infernal, fue una víctima de una Purga donde perdió a toda su familia. Su forma de actuar como un alto cargo convence, pero en el caso de una persona más humana, más cercana, no convence del todo.
A pesar de revocar esta norma, de nuevo estamos ante una entrega que sí, entretiene, pero no consigue explotar esa gran idea de DeMonaco. Que sinceramente, yo soy la gente y está puteada por unos políticos y se me da la oportunidad de ir a por ellos, creerme que mi objetivo prioritario serían los políticos. Pero aquí muestra muy bien DeMonaco la estupidez humana y el desaprovechar oportunidades, centrándose en un objetivo que sí, también es un cargo político… pero no es creíble. Aquí si hubiese una Purga y dejasen hacer eso, no estaríamos ahora mismo en la situación que estamos. Bueno, estoy viendo que se me está yendo el santo al cielo con este tema.
Conclusiones Election La Noche de las Bestias
Esta tercera entrega, es entretenida, con escenas bastante potentes y personajes que perfectamente se podrían coger para un futuro spin-off. A pesar de ello, Election es algo inferior a la entrega anterior, donde pudimos ver mejorías más notorias respecto a la anterior. Aun así se perfectamente que a los que os guste la saga os entretendrá y a los que no os convencieron las anteriores, será una de esas películas que iréis olvidando con el paso del tiempo.