Hace justo un año nuestro compañero Dani Mangas publicaba en Game It su reseña de Football Manager 2017. Hago hincapié en ello ya que, como es evidente, ha pasado otro año más… otro año en el que el discurso del año anterior prácticamente se repite. La serie de juegos para managers que nos llega de la mano de Sports Interactive tiene ya unos años a sus espaldas,y es toda una veterana en lo que a juegos de gestión deportiva se refiere. Pero el rey se ha relajado, y nos trae por cuarto o quinto año consecutivo un título que para bien o para mal cambia muy poco con respecto a anteriores entregas.
El rey de los managers
Football Manager es una de las marcas más populares dentro de esta comunidad nicho de la gestión deportiva. El título de Sports Interactive es un juego que puede presumir de una de las bases de datos más complejas y extensas que podamos manejar, además de ofrecer una recreación lógica de como funcionan y fluctúan dichos datos. Ser un mánager no es ni una tarea fácil ni una tarea para cualquiera, es decir, si no eres asiduo a esta clase de juegos probablemente sea arduamente complicado introducirse con esta entrega.
Football Manager 2018 es un juego que ha evolucionado muy poco con respecto a su entrega anterior. Las novedad más importante (como cada año) es la actualización completa de las plantillas y datos que manejaremos esta nueva temporada. El público de la franquicia lleva bastante tiempo demandando una mejora gráfica o mejoras jugables que hagan más sencillo e intuitivo ciertos aspectos de la gestión, pero lejos de eso, esta nueva entrega repite prácticamente todos los tropos de la franquicia, con la excepción de incluir una interfaz más cómoda a la hora de dirigir el partido en directo y de cambiar de simulación 3D a 2D (o mezclando ambas).
Pocas mejoras se pueden percibir claramente, desde luego Sports Interactive no parece querer revolucionar demasiado su fórmula, así que ha apostado claramente por una entrega puramente continuista. Sigue siendo una dinámica realista: crearemos vínculos con nuestros jugadores, dialogaremos con ellos y les haremos promesas, gestionaremos la economía del club… Lo de siempre pero con más y nuevos números. Hacer las alineaciones es tan satisfactorio como complicado debido a la multitud de opciones que tendremos, así que como cabría esperar, todo apartado técnico y estratégico recaerá en nuestras manos y podremos gestionarlo a nuestro antojo.
Aquí empieza a oler a viejo…
Aunque los fans de este tipo de juegos seguramente encuentren lo que buscan, lo cierto es que la comunidad lleva ya algunos años pidiendo y exigiendo mejoras más sustanciales. En primer lugar, año tras año se hace más evidente que la saga necesita un lavado de cara gráfico urgente. El apartado visual que nos encontramos es a estas alturas y después de tanto tiempo es inexcusablemente mediocre. Parece increíble que después de tanto tiempo este aspecto se encuentre aún tan desfasado y parezca interesar tan poco a sus desarrolladores. Los modelados 3D son malos, con un aspecto tan añejo que puede recordar a los FIFA de hace 10 o 15 años… Obviamente no se exigen gráficos fotorrealistas o de nueva generación (no hacen falta), pero sí un aspecto que al menos permita creernos que estamos en un partido de fútbol. Los partidos son monótonos de ver y muy aburridos, cada vez hay menos alicientes para querer disfrutar esta faceta del juego y la simulación no explota en absoluto la acción, consiguiendo que los partidos sean algo anodino y carente de cualquier interés. Es necesario remarcar que la saga no está aguantando el ritmo de juego por año como debería, y cada vez ofrece menos alicientes para comprar la respectiva entrega anual, ya que no aporta ninguna evolución práctica o de suficiente peso.
El juego nos invita a crear a nuestro propio avatar con multitud de variables estratégicas y, cómo no, visuales. Podremos sacarnos una foto con nuestra cam que supuestamente ayudará a crear a nuestro avatar con la mayor verosimilitud posible… pero siendo sinceros lo normal es que el resultado sea cualquier cosa menos alguien parecido a nosotros.
Las limitaciones visuales del título empañan muchísimo el resultado final, y no es que sean algo estrictamente necesarias en estos juegos, pero después de tantos años los jugadores empiezan a exigir más cambios a mejor en este aspecto…cambios que se ajusten a los tiempos que vivimos.
Pocas mejoras, menos innovación
Dejando de lado la estética, Football Manager 2018 continua tropezando es sus dos clásicas piedras: licencias y tutoriales.
Un año más el juego llega sin las licencias de los clubes y las ligas que integran sus bases de datos. Los nombres de los jugadores, los entrenadores, presidentes, estadios, preparadores físicos, etc… son reales y sus personalidades están bien representadas en el juego, pero los equipos en los que militan y sus ligas son ficticios con nombres como: Vigo, Coruña, Barcelona.
Otro de los clásicos problemas de esta serie de juegos es la integración de nuevos jugadores y tutoriales. Como bien remarcaba el año pasado Daniel Mangas en su análisis, empezar en Football Manager hoy en día puede abrumar y desmotivar a los nuevos jugadores. La franquicia no parece pensar que probablemente haya nuevos jugadores y parte del público dispuesta a darle una oportunidad a su título,por lo que otro año más no se ha molestado en facilitar las cosas o organizarlas de manera más cómoda, visual o intuitiva que no frustre o signifique una barrera de entrada para los nuevos.
Conclusiones de Football Manager 2018
La franquicia Football Manager cumple su cita anual con una entrega perezosa que poco ha innovado con respecto a la de otros años. Lejos de integrarse en el mercado como el rey que es en esta clase de juegos, Sports Interactive se ha relajado y pretende vender el mismo producto año tras año. No podemos decir que no funcione y no sea un juego divertido, ya que por supuesto que lo es, pero es necesario reconocer que tanto los jugadores que novatos como los mas veteranos necesitan cambios que les inciten a jugar. Incluir mejoras gráficas que doten de un estilo visual mas moderno al título es algo necesario y exigible a estas alturas, los mejores se deben exigir lo mejor, y eso es algo de lo que parece haberse olvidado esta compañía. Dentro de poco vuelve PC Fútbol, y es posible que si lima alguno de estos errores les empiece a comer la tostada… por ello esperamos que la saga rey en los juegos de mánager se ponga las pilas y que su próxima entrega venga con mejoras sustanciales.