Muchas veces hemos sido testigos de como algunas franquicias exitosas dentro del cine o de lo videojuegos recibían su pertinente app/juego que las promocionase o que simplemente aprovechase el rebufo de la obra original. Pero por el contrario, pocas veces hemos visto como un juego nacido como app gratuita para smartphones llegase a convertirse en un videojuego completo hecho y derecho. Ese es el caso de Gear Club Unlimited.

El juego desarrollado por Eden Games llega a Nintendo Switch, de la mano de Meridiem Games, tras haber sido generosamente renovado en lo que a gráficos y jugabilidad se refiere, pero manteniendo esa esencia de juego sencillo y accesible sin demasiadas florituras.

Bienvenido al club

Eden Games es un estudio con tablas en los juegos de conducción. Creadores de títulos tan conocidos como Test Drive Unlimited o el mítico V-Rally, la compañía se estrena en Nintendo Switch con un experimento que, pese a no ser un referente dentro del género, ofrece una jugabilidad divertida y bastante contenido.

A primera vista podemos comprobar que se trata de un juego de conducción puramente arcade. Podremos alcanzar altas velocidades con nuestro coche sin apenas perder el control del mismo, y aunque si quitamos las ayudas nos encontraremos una mayor exigencia en el control, en ningún caso estamos ante un juego que alcance el nivel de realismo de un simulador. De inicio contaremos con ayudas en la frenada, control de dirección, derrape… algo que puede darnos la sensación de que jugamos un Scalextric virtual en el que todo parece ir sobre raíles. También hemos podido comprobar que pese a tener un acabado visual bastante agradable, las físicas que presenta son bastante sencillas: coches que colisionan sin producir ningún tipo de efecto o desperfecto, frenadas instantáneas, vehículos que parecen ir sujetos al asfalto…

Toda esta sencillez parece venir como herencia de su pasado móvil, que inevitablemente ha terminado afectando a la factura final del título. Gear Club Unlimited es un juego amable con los jugadores, aunque a veces puede parecer que hasta demasiado. Durante las carreras se nos ofrecerá la posibilidad de hacer un rebobinado para rectificar errores como choques, salidas de pista o cualquier cosa que pueda afectar a nuestro tiempo de carrera; ayuda que resta tensión a la experiencia y que minimiza la importancia de no cometer fallos.

Una propuesta con mucho contenido

La cantidad de contenido que ofrece el título es abrumadora en algunos aspectos aunque quizás un tanto escasa en otros. Por un lado tenemos un total de 30 vehículos disponibles de marcas tan emblemáticas como BMW, Lotus, Mercedes-Benz, McLaren. Los vehículos son fieles al aspecto de los originales y muestran un acabado elegante, pese a que visualmente no llegan a lo que se puede ver en otros títulos de plataformas gráficamente más potentes (como es lógico). Las texturas parecen un tanto lisas y los interiores no parecen tan trabajados, al igual que el piloto que parece evitarse en todo momento.

En lo referente a diferencias palpables entre la conducción de uno u otro vehículo es difícil discernir cuáles son. Salvo la frenada y la aceleración no parece haber mucha diferencia entre conducir uno u otro coche, lo que resta interés a la hora de adquirir nuevas máquinas y probarlas. Es interesante todo el aspecto de personalización que ofrece el título para mejorar nuestro coches, pero eso es un tema que trataremos más adelante.

En cuanto a circuitos, torneos, modos de juegos y demás, Gear Club Unlimited ofrece una gran variedad y cantidad. Las pistas se generan de forma procedural, es decir, que en base a una serie de algoritmos los circuitos se generan de forma aleatoria, lo que para bien nos ofrece una cantidad ingente de pistas nuevas y para mal estas tienden a repetirse en su estructura. En cuanto a tipos de circuitos tendremos dos: Asfalto y Rally. Las diferencias entre ellos repercuten básicamente en la frenada, ya que el coche derrapará un poco más en tierra que en asfalto y además el terreno será más irregular, por lo que encontraremos un mayor número de saltos y no podremos pisar el acelerador tan a fondo como nos gustaría. Lo cierto es que a la larga (y contando con las mejoras que podremos hacer al coche) las diferencias entre ambos modos serán cada vez menores, aunque siempre se agradece la variedad. Otros modos que nos han parecido bastante bien resueltos son “La Liga” (modo online) y el multijugador local. En el online tendremos una serie de circuitos específicos para la liga, en ellos competiremos contra los fantasmas de los demás usuarios que dejan su récord en las ultimas 24 horas, sin poder usar el rebobinado pero pudiendo intentarlo todas las veces que queramos. Dependiendo de nuestra clasificación ganaremos mejores o peores recompensas, y aunque no podamos competir a la vez con otros usuarios, el modo funciona perfectamente sin necesidad de buscar partidas.

El aspecto visual de los circuitos es otro de esos detalles que nos permiten comprobar que Gear Club Unlimited viene de plataformas móviles, ya que pese a que los vehículos y su jugabilidad si que han sido claramente modificados, lo que veremos como ambientación en los escenarios se presta bastante pobre y repetitivo teniendo en cuenta la inmensa cantidad de pistas que hay. Un punto a favor es la buena iluminación que presenta el título, ya que tanto en las pistas de día como en las nocturnas notaremos unos efectos bien conseguidos que aportan cierto realismo.

Nuestro espacio hecho a medida

El progreso en Gear Club Unlimited es claramente heredado del formato free to play que tantas veces hemos visto en juegos de smartphones. La campaña consistirá en ir participando en diversos eventos para poder desbloquear más y más circuitos, cumplir misiones y conseguir logros. Todo lo que hagamos nos reportará dinero que utilizaremos para mejorar nuestro “Club”.

Y es que si algo nos ha parecido entretenido en el juego es avanzar y mejorar ese espacio que convertiremos en nuestro santuario del automóvil. El club es un lugar que deberemos construir poco a poco añadiéndole diferentes puestos en los que mejorar y tunear nuestro coche en los talleres de carrocería, motores, ruedas, etc. Además podremos administrarlo a nuestro gusto, exhibiendo nuestros mejores coches y decorando el lugar como más nos guste. Realmente es en el Club donde más notaremos nuestra progresión dentro del juego, aunque para desbloquear los diferentes puestos tengamos que subir niveles, desbloquear logros y cumplir cientos de misiones, algo que por momentos puede parecer tedioso. Un apunte negativo es la falta de gestión de personal, algo que estaría bien para ver el lugar mas habitado y con cierta vida, ya que en realidad parece un concesionario vacío y lleno de puestos y coches que parecen moverse y mejorarse solos.

Factura en Nintendo Switch

El rendimiento del juego es acorde a la portátil de Nintendo, es decir, pese a que no hace demasiadas florituras gráficas estamos ante un juego que se mueve 30 fps sin aparentes bajones y que podremos disfrutar a 1080p en el Dock y 720p en modo portátil. El control es preciso independientemente de cómo juguemos y se nos da la posibilidad de controlar el coche como si el mando o la Switch fuese el volante, algo que nos parece ingenioso pero que realmente nos ha parecido poco práctico. A nivel de banda sonora estamos ante un título que cumple pero tampoco destaca. Sus temas son chill-out o incluso hilo musical de grandes almacenes, algo que esta bien para ambientar pero que no deja ningún sonido o tema emblemático o reconocible.

Quizás lo peor del aspecto sonoro esté en los efectos, que parecen sacados de la app móvil y que tampoco parecen demasiado creíbles. Todos los coches suenan igual y algunos sonidos (como el de los derrapes) parecen pre establecidos de una galería de sonido.

Conclusiones de Gear Club Unlimited

Gear Club Unlimited es un buen juego de conducción arcade que gustará a los menos exigentes y decepcionará a los más asiduos al género. La cantidad de contenido que ofrece es verdaderamente enorme: modos de juego, circuitos, coches, el Club… Pero el problema más evidente que tiene es que quizás pueda llegar a hacerse repetitivo tanto por su forma de progresar como por su jugabilidad, algo que no deja de hacer de el un juego disfrutable.

Gráficamente y a nivel sonoro da el nivel,pero tampoco alcanza el de otros grandes del género, lo que nos invita a pensar que quizás ha heredado demasiado de su pasado en plataformas móviles. Puede no ser la opción definitiva de juego de conducción en Nintendo Switch y que quizás su precio sea algo elevado, pero teniendo en cuenta el catálogo actual se presta como una opción interesante para los amantes de la velocidad.

https://www.youtube.com/watch?v=GrSMT4sTi4E