Si por algo destacan habitualmente las compañías de periféricos es por ofrecernos bastantes variedad en cuanto a precios y calidades en sus productos. Como habéis podido ver en nuestros anteriores análisis, Genesis mezcla un poco de todo, siempre intentando darnos productos a buen precio con buenas calidades, pero esto no siempre es necesario y es que a veces queremos algo que dure, con funcionalidad y que no sea ostentoso. De ahí que la compañía haya puesto en nuestras manos el Genesis CX55, un combo de teclado de membrana más ratón que nos dará todo lo necesario para poder trabajar y jugar sin problemas ni exigencias.
Como siempre, antes de comenzar nos gustaría darle las gracias a la marca por la confianza depositada en nosotros.
Especificaciones técnicas
Dejamos que sea la propia compañía la que nos cuente las principales características de su producto.
Como podemos ver está todo un poco mezclado y es que lo que tenemos ante nosotros son dos productos en uno. Por un lado tenemos un ratón con un sensor óptico Avago 3050 con unos DPIs máximos de 4.000, suficiente para la mayor parte de las tareas, un polling rate de 1.000 Hz como suele ser habitual y seis botones. Nos llega con un cable trenzado acabado en un USB sin chapado en oro. En cuanto a la iluminación no tenemos demasiada y es que solamente tendremos la del logo de Genesis en su parte trasera con dos modos, respiración y fijo, viniendo acompañado de un pequeño software de gestión.
Por otro lado tenemos un teclado de membrana, con 104 teclas por lo que estamos ante un sistema completo, con un pequeño reposamuñecas y un cable también trenzado, este sí que acaba en un USB bañado en oro. Podremos gestionar su iluminación mediante la combinación de teclas, solo teniendo tres: fijo, respiración y apagada (solo disponible en color rojo). Lo acompañan distintas teclas de función multimedia.
Unboxing
Genesis sigue manteniendo la misma línea de embalaje que con el resto de sus productos, trayéndonos una caja donde predomina el color negro y delante podemos ver una imagen de ambos productos, mientras que por detrás tenemos algunas de sus principales funciones así como sus características básicas.
Una vez abrimos la caja nos encontramos tanto como con el ratón como con el teclado, y es que ambos vienen envueltos en una tela perfecta para que no cojan polvo durante su transporte o almacenaje. Sacándolo todo de la caja solo nos queda enchufarlo y comenzar a utilizarlos.
Genesis CX55
Para poder hacer un análisis en condiciones de este combo tendremos que dividirnos en dos.
Comenzando por el teclado vemos que estamos ante un teclado de membrana que nos ofrece una buena comodidad, en parte gracias a su pequeño reposamuñecas. Su tamaño es bastante considerable y es que la estructura de plástico a su alrededor es grande, con una separación entre teclas que imita mucho la de los teclados mecánicos, por lo que estamos ante un perfil alto.
Tendremos la posibilidad de utilizar sus teclas multimedía, las cuales nos permiten subir y bajar el volumen del PC, darle a Play, siguiente canción… así como abrir nuestro gestor de correo, reproductor de vídeo… También de esta manera podremos gestionar la iluminación, aunque en este sentido tiene muy poco que ofrecernos y es que solo podremos tenerla en color rojo en tres modos: apagada, fija y respiración.
Si nos fijamos por la parte de atrás vemos que tenemos las ya mítica pestañas para causar un efecto grada y que sea más cómodo de utilizar, así como unas pequeñas patas de goma para impedir que se mueva sin que queramos. Cabe destacar los raíles para los cables, algo interesante si queremos pasar alguno por debajo del teclado y que no moleste.
En cuanto al ratón estamos ante un dispositivo bastante normal, con acabados plásticos y un cierto tacto rugoso por la parte de encima, bastante cómodo para utilizarlo. Su peso es bastante ligero, siendo de tamaño medio, nuestro favorito ya que se amolda para cualquier tipo de mano. En su lateral encontramos dos botones pequeños los cuales podremos configurar gracias a su programa de gestión, el cual nos permitirá tener hasta cuatro perfiles distintos. Su forma es simétrica, por la que podemos utilizarlo con ambas manos, pero los zurdos no encontrarán dos botones.
El botón central se reserva para el cambio de DPIs, los cuales también podremos configurar a nuestro gusto, dándonos este el color de su iluminación (que estará fija en modo respiración). La rueda tiene un movimiento bastante rápido por puntos, con un acabado bastante básico. Por su parte inferior nos encontramos con el sensor óptico Avago 3050, el cual nos da un buen rendimiento para un uso habitual y sin ser competitivo, y tres surfers que harán que tengamos control sobre el deslizamiento del ratón.
Atendiendo a la iluminación de ambos dispositivos como decíamos es bastante limitada y es tendremos un solo color disponible para el teclado, el rojo, en tres modos mientras que el ratón solo dos.
Conclusiones y experiencia de uso
Genesis pone en nuestras manos un equipo básico para comenzar a introducirnos en el mundo gaming o si realmente no queremos hacer una gran inversión y sí tener algo medianamente vistoso. Estamos ante un producto que podemos encontrar a 31,94€ en Coolmod, por lo que no podemos esperar demasiado de un teclado y un ratón a este precio. Lo que tiene que ofrecernos es bastante teniendo en cuenta, y es que es un teclado de membrana con un buen tamaño y comodidad, con una iluminación en rojo y un ratón con un software de gestión incorporado y un buen sensor para lo que está pensado.
Durante nuestras horas de uso no hemos encontrado problema alguno y es que ambos dispositivos cumplen de sobra con lo que podemos exigirle a un teclado de membrana y un ratón que alcanza los 4.000 DPIs. La iluminación es muy básica pero realmente no podemos pedirle más, trayéndonos incluso un software de gestión para el ratón que funciona perfectamente y que nos da hasta 4 perfiles distintos.
Por todo esto y lo anteriormente mencionado le otorgamos los galardones de calidad/precio y recomendado, ya que es una opción muy interesante para poder comenzar a probar el mundo gaming sin necesitar una gran inversión, así como tener dos periféricos perfectamente funcionales para trabajos que requieran poca precisión.