2017 pronto será historia. Historia en el mejor sentido de la palabra, ya que es muy posible que estemos hablando de uno de los mejores años que ha vivido la industria del videojuego en toda su historia. Ha sido un año lleno de lanzamientos exitosos y de juegos que han sorprendido viniendo desde el más absoluto ostracismo… pero como todo en esta vida, siempre ha de existir un contraste. En este caso tiene nombre y lo podemos encontrar ya a la venta: Genetic Disaster.
Desastre a pequeña escala
Genetic Disaster es un dungeon-crawler cooperativo desarrollado por Team8 en el cual deberemos formar equipo con alguien para disponernos a avanzar niveles en una mazmorra que se genera proceduralmente.
El juego presenta un aspecto colorido, amigable e incluso llamativo… aunque lamentablemente es quizás lo mejor que nos puede ofrecer; siendo el videojuego independiente más genérico y desalmado de los que he tenido que rendir cuenta recientemente.
Genetic Disaster es un juego de disparos en perspectiva cenital que nos puede recordar en su planteamiento a juegos como The Binding of Isaac o Enter the Gungeon salvando muy mucho las distancias. La cosa va de escoger uno de los cuatro personajes encasillados dentro de un rol y avanzar lo máximo que podamos dentro de la mazmorra en la que poco a poco conseguiremos armas, munición y habilidades que nos ayudarán a proseguir con nuestra tarea de eliminar a todo ser viviente que nos encontremos.
El planteamiento de estas clases se podría considerar correcto si no fuese porque salvo una de las cuatro clases el resto podría pasar por un mismo rol, el de matar enemigos. Es decir, tenemos un solo personaje defensivo que actuará como tanque y el resto servirán exclusivamente para el ataque (aunque cada uno apoyándose en un estilo). Cada personaje tiene una habilidad (en el caso de Sneaky también un rasgo pasivo) que junto a su aspecto nos hacen tener un concepto global sobre cual es su rol en el equipo, para que sirve y cómo es. Lamentablemente esto es algo que deberemos deducir nosotros mismos ya que el juego no hace absolutamente nada por apoyar el desarrollo de sus personajes. Exceptuando una breve explicación en el menú de selección, la partida comienza directamente tras elegir nuestro personaje… Ni historia, ni introducción, ni un solo bocadillo de texto.
Genetic Disaster pretende ser directo y piensa que con su jugabilidad puede hacer suficiente como para resolver: enganchar al jugador y meterlo de lleno en el ajo. El mapa se genera de forma aleatoria, esto quiere decir que cada vez que comencemos una partida los niveles serán aparentemente diferentes, algo que efectivamente es cierto pero que no deja de caer en el craso error de la generación aleatoria: generar mapeado sin alma y sin sentido.
Siempre es diferente, pero siempre es igual. Así se sienten todas y cada una de las pantallas que conforman Genetic Disaster. Lejos de ofrecer entornos reconocibles, salas que llamen la atención explorar y que oculten ciertas sorpresas; el juego genera los niveles en base a una formulación extremadamente sencilla y repetitiva en sus patrones. Tenemos salas con enemigos, salas con “puzles” (consistentes en colocar una pieza en su encaje), salas de looteo/obtención de habilidades y salas con montones de NADA.
Sencillo. Esta fórmula se altera cada 4 niveles ya que en ese caso se procederá a añadir una sala de Final Boss. Tanto los enemigos como los los jefes finales de este juego son seguramente de los más genérico y menos inspirado que hemos podido apreciar en mucho tiempo. Los seres contra los que luchamos carecen totalmente de cualquier tipo de trasfondo o explicación y visualmente dan la sensación de ser simples sprites que actuarán como esponjas de balas. Se trata de una suerte de robots-insecto que presentan 3-4 modelados diferentes y que tienen un patrón de ataque tipo predeterminado. Por otro lado los bosses presentan un mayor detalle visual, pero por el contrario nos ofrecen unos combates lentos y aburridos… con secciones ridículas en cuanto a su desarrollo y, una vez más, carentes de cualquier tipo de personalidad o carisma.
El problema es que esto se contagia en todos los aspectos del juego. El carisma que a priori transmiten los protagonistas por sus modelados es lo único con cierto cariño que podemos apreciar en Genetic Disaster.
Son dos detalles los que parecen haber fundamentado la idea de crear este juego. El primero es el cooperativo online (lo cual se agradece) y el medidor de Ciclo, que cambiará de forma aleatoria creando algunos añadidos jugables que dotarán a la partida de algunas nuevas reglas bastante locas como: balas que rebotadoras, chuzos de hielo precipitándose desde el techo…
Estos dos factores han sido las ideas que desde el estudio Team8 nos han querido vender en su juego, y que lamentablemente no han llegado ni de lejos a dar lo que se exige de un juego que actualmente cuesta 20€ en Steam. La cantidad de armamento y skills diferentes que nos podremos encontrar dentro de las mazmorras (las cuáles también aparecerán de manera aleatoria) es bastante reducida, sin demasiada variedad de opciones, aunque por suerte si que notamos diferencia entre usar un arma u otra gracias a un gunplay medianamente bien llevado.
Mucha aleatoriedad y poco carisma
Gráficamente es un juego de corte medio-bajo y con un apartado técnico que deja bastante que desear. Los modelados de sus protagonistas están bien conseguidos al igual que sus animaciones, pero como hemos mencionado carecen de cualquier tipo de trasfondo o carisma. El aspecto del escenario es repetitivo y demasiado genérico, volviéndose aburrido en tiempo récord y mostrando una variedad de enemigos ínfima si lo comparamos con otros rivales de su género que, por menos dinero, muestran una calidad infinitamente mayor.
El juego llega con opciones bloqueadas y sin poder configurarse ninguno de sus aspectos, salvo el idioma de los textos que son prácticamente inexistentes aunque tenga traducción a varios idiomas (salvo al español). Desde la pantalla de inicio tan solo nos permite jugar o salir. Para empezar la partida podremos hacerlo en solitario o en compañía, por lo que deberemos invitar a alguien, tarea que nos ha costado en algún momento debido a problemas de conexión o bugs a la hora de detectar ratón y teclado/mando en el menú.
Una vez en la partida hemos detectado bastantes bugs, ralentizaciones y detalles visuales (como por ejemplo las animaciones de los chuzos de hielo al caer) que nos han parecido de muy bajo nivel e incluso feos.
Conclusiones de Genetic Disaster
Genetic Disaster es un juego genérico y muy poco inspirado. Es una obra que sirve como contraste para todo lo bueno que hemos visto en este 2017 y un título bastante olvidable. Sin desmerecer al estudio cabe recalcar que la idea que han tenido es buena, pero parece haber sido ejecutada sin ganas y con muy poca inspiración por parte del equipo desarrollador. La generación procedural a veces ayuda a hacer que los juegos sean más grandes y profundos, pero en el caso de este título consigue dejarlo sin corazón y poner al descubierto todas sus carencias. Otro detalle negativo es su elevadísimo precio en Steam aunque actualmente se encuentra en rebajas, algo que puede provocar que pocos sean los que se atrevan a darle una oportunidad.