¿Qué estarías dispuesto a hacer para salvar a una persona que quieres? Quizás Last Day of June ha venido para dar una respuesta a esta pregunta (aunque por supuesto hablamos del “querer” romántico, porque lo de los familiares y amigos ha sido bastante omitido). Ovosonico, un estudio italiano con grandes talentos, ha tenido en sus manos los medios para poder llevar a cabo el juego que tenían en mente con la inestimable ayuda de 505 Games. Lo que nos llega es una golosina para los ojos, una propuesta que nos recuerda al Día de la marmota o al Efecto Mariposa y que nos narra una historia bastante interesante, pero que desgraciadamente no ha sabido adaptarse como es debido a un medio como el del videojuego.
Un cuento sobre la muerte
Last Day of June es un juego indie muy sentimental y adulto estrenado recientemente en PC y PS4. Se trata de un juego que centra la práctica totalidad de su experiencia en contarnos una historia bastante triste sobre la muerte y el vacío que puede dejar la ausencia de una persona que amamos. En un inicio nos ponemos en el papel de Carl, un chico que vive en un pequeño pueblo de cuatro casas (literalmente) con su mujer June. Desde el comienzo de la aventura notaremos que el juego quiere entrar en nuestro corazoncito usando una gama de colores cálidos que parecen salir de un cuadro de Monet y con esos personajes cabezones tan entrañables como monos. La música es algo que ayuda mucho a lograr su cometido, la elección de los temas musicales ha sido algo en lo que el estudio ha puesto bastante énfasis.
Esta historia comienza presentándonos a nuestra feliz pareja protagonista. Ambos viven felices y en paz disfrutando de todo lo bello que les rodea, pero antes de que nos demos cuenta el reloj del pueblo marcará las 7 de la tarde… Hora en la que sucede el fatal incidente que se resuelve con nuestro protagonista viudo y en silla de ruedas.
El comienzo es prometedor, ya que Last Day of June sabe que quiere transmitir. El problema empieza cuando vemos como lo hace… ahí es cuando comenzamos a tener esa sensación extraña que nos hace preguntarnos ¿porque esto es un videojuego?
Obviamente no siempre la finalidad de un juego tiene que ser entretenernos con su jugabilidad. Es cierto que los juegos son capaces de contar y hacer llegar historias de una forma diferente e imposible para el resto de medios, pero es precisamente por eso…porque nos deja intervenir en la acción. Porque mediante el uso de un “controlador” podemos llegar a asumir una identidad ficticia, meternos en el papel de un personaje y pensar que somos el o ella.
Last Day of June se olvida de esto por momentos. Tenemos un juego de aproximadamente 3-4 horas de duración que basa sus mecánicas en la resolución de puzzles muy sencillos y la repetición. Carl, ahora solo en casa, no puede más con esa soledad que le atormenta… La pérdida de June ha significado un cambio considerable en su vida,por ello decide volver al estudio donde su mujer ejercía su labor como pintora y descubrir los 5 retratos que allí se encuentran. Por motivo de algún tipo de magia, cuatro de esos retratos guardan una especial conexión con los cuatro habitantes del pueblo, los cuales serán personajes jugables aparte de a Carl. Con ellos tendremos la oportunidad de intentar cambiar los sucesos que se vivieron en ese último día de Junio (desde las 3 de la tarde hasta las 7) para así poder salvar a June.
Como podéis ver la idea no suena mal y de hecho el asunto pinta curioso cuando vemos que un cambio en una de esas rutinas puede suponer (o no) un cambio notorio de los acontecimientos. Deberemos viajar varias veces en el tiempo para revivir los sucesos que viven estos personajes (el niño, el abuelo, el ricachón y la mejor amiga de Carl) y combinando los distintos finales para su rutina quizás logremos traer de nuevo a la vida a June… pero en la práctico lo que tenemos son cuatro personajes cuyas historias y puzzles varían muy poco, y que además, frenan muchísimo el ritmo del juego con ingentes cinemáticas que deberemos revisualizar una y otra vez. Algo enormemente tedioso teniendo en cuenta que deberemos revivir los acontecimientos de cada personaje al menos una o dos veces para poder hacer pruebas cambiando sus rutinas. A nivel de reto estos puzzles no ofrecen nada del otro mundo, son fáciles y es imposible (o casi) atascarnos ya que el juego no quiere eso… quiere que sigamos hacia adelante y lo acabemos sin ninguna complicación mayor que la de reflexionar sobre lo que nos están contando.
Sentimiento y mucho arte
La banda sonora original del título ha sido prácticamente encargada en su integridad al artista Steven Wilson, autor de canciones como Drive Home, que ha sido una de las principales inspiraciones para el estudio a la hora de crear el juego. Sus temas han ayudado a hacer posible aflorar todos esos sentimientos con temas tranquilos que rompen el silencio con fuertes guitarras que nos hacen sentir esa distancia imposible de recuperar cuando la muerte está de por medio.
Formalmente Last Day of June es un verdadero gustazo para los sentidos. Hablamos de un juego cuyos desarrolladores sabían perfectamente lo que quería crear y lo han llevado a cabo haciendo gala de un diseño de niveles más que correcto (el pueblo y los entresijos que unen todos sus caminos están bien pensados) y unos personajes que saben transmitir a la perfección lo que sienten con sus gestos y sonidos.
Este último aspecto es algo que remarcaría de manera muy positiva sobre el título. Sus personajes parecen sacados de una película de Tim Burton, gozan de una personalidad definida y motivaciones diferentes que les llevarán a hacer una u otra cosa durante el día. Estos personajes saben transmitir todo ello sin utilizar ni una sola palabra (solo sonidos) y a la vez carecen de ojos (el espejo del alma), por lo que estamos ante una nueva prueba del saber hacer del equipo de Ovosonico. Es de recibo comentar que tampoco estamos hablando de personajes demasiado complejos, que afloren debates entorno a su figura, pero sí son parte de una historia que funciona gracias a ellos y a esas pequeñas cosas que los hacen especiales… Aunque quizás sean demasiado pequeñas.
Técnicamente hablando poco hay que decir del título salvo que se mueve con fluidez y es un deleite visual en su resolución máxima. No hemos sido testigos de ningún bug importante mientras jugamos ni tampoco detectamos como «fallo» su difuminado constante del color a largas distancias. Existe algo de popping, pero nada que llegue a afectar a una experiencia de esta índole.
Conclusiones de Last Day of June
Last Day of June es un juego narrativo al 100%. No es un juego para todo el mundo, ni siquiera para todo el mundo que busque experiencias de este estilo tan enfocado en su narrativa. Su mayor problema es que aun siendo tan corto existen momentos de tedio y relleno, algo que sienta muy mal al juego si tenemos en cuenta lo fácil que es y lo poco que dura. Nos ofrece una historia bonita y reflexiva que seguramente llegue al corazón a más de uno, aunque ciertos en ciertos momentos parece restarle importancia a la fluidez de su historia para caer en la reiteración. No es un gran juego, pero se podría decir que es una obra de arte interactiva que falla precisamente en eso… en la interacción con el jugador.
https://youtu.be/Y9P2NuLg13A