Durante 1983 y 1992 en España vivimos los mejores años que ha dado el software de entretenimiento en este país, sobre todo para máquinas de 8 bits. Fuimos capaces de ser los segundos productores de software a nivel europeo aunque los mejores del mundo en cuanto a calidad del mismo.
Aunque no todo fueron luces durante esa época dorada, hubo algunas sombras, y nunca mejor dicho, en esta historia que a la vez va a servir como homenaje a esta gran época.
El mito recae sobre un chico que quizás era la mente más brillante de su generación, gran apasionado de los videojuegos casi desde que tenía conciencia. Logró grandes proezas en la industria del software español, siendo así el más aclamado de esta maravillosa era. Sus méritos fueros reconocidos a nivel mundial.
Realizó varios videojuegos para plataformas 8 bit, considerados por muchos como verdaderas obras de arte y que a día de hoy aun siguen conservando esa magia que los hacen tan especiales y que por supuesto reportaron muchos beneficios.
Gracias a su gran trayectoria, obtuvo numerosos premios por grandes publicaciones del sector a nivel nacional.
Este joven muchacho con grandes éxitos y mucho dinero, quería lograr algo más en el mundo del ocio digital.
Nuestro protagonista en cuestión, decidió abandonar el desarrollo de videojuegos y centrarse en otros proyectos para hacer más fácil la programación de juegos. Estuvo durante 9 largos años investigando sobre esto y llevándole más de un quebradero de cabeza. Tuvo que recurrir a casi cualquier cosa para conseguirlo.
Pero fue entonces cuando el futuro del exitoso programador comenzaría a ensombrecerse. Tenía gran interés en los temas relacionados con el esoterismo y la manera de comunicarse con el más allá queriendo aunar en un título estas prácticas que le encantaban. Encontró varios métodos de contacto o visualización del otro lado aunque no con la intención de saber cosas sobre el futuro.
Durante varias noches realizó el ancestral rito del psicomanteum que consistía en ponerse delante de un espejo con poca ropa y unas velas detrás de su cuerpo alumbrando un poco la estancia. En completo silencio y tras varias minutos, iba apareciendo poco a poco una figura del más allá en el espejo para comunicarse con el que realizaba esta acción.
Tres noches seguidas realizó esta experiencia de forma exitosa y llegó a confesar a sus más allegados que durante estas prácticas, cerca de su hombro, aparecía el rostro de un anciano que, como si fuese una pintura negra con pequeña nariz y una sonrisa casi malévola, se comunicaba con él.
Algunos de sus amigos más íntimos llegaron a hablar de su obsesión con estas prácticas.
Tras ello, y por desgracia, acabó suicidándose. Como indicaban varios periódicos del lugar, subía a la azotea de su edificio con una cara de pánico terrible y se arrojó al vacío desde la ventana. Así también lo aseguraban dos vecinos testigos, que lo vieron como si algo que le causaba verdadero terror lo empujaba a través de la ventana.
En 1999 y con tan sólo 34 años este genio del ocio digital puso fin a su vida. Aunque sus obras nos dejarán siempre su recuerdo y un legado digno de honrar. Un genio del software español que pese a esta leyenda negra que se cierne sobre su recuerdo, nos dejó un legado impresionante.
Desde Game It os recomendamos jugar a una de las grandes obras de la época, La abadía del crimen. Su revisión del juego está disponible de forma gratuita en abadiadelcrimen.com
Ya al final de mi vida de pecador, mientras espero el momento de perderme en el abismo sin fondo de la divinidad desierta y silenciosa; en esta celda de mi querido monasterio de Melk, donde aún me retiene mi cuerpo pesado y enfermo, me dispongo a dejar constancia en este pergamino de los hechos asombrosos y terribles que me fue dado presenciar en mi juventud…
-La abadía del crimen
Todos los artículos que tengan que ver con esta serie de «Leyendas Urbanas de los Videojuegos» están perfectamente documentados con medios de comunicación muy importantes. Recomiendo leer éste artículo para conocer el significado de «Leyenda Urbana»