No voy a mentiros: tengo verdaderas fiebres obsesivas con Los Sims. Cuando salió el primer juego, recuerdo a una de mis amigas en el cole contándome que su Sim se había caído por las escaleras y se había roto la pierna y que como no estaba casado y nadie podía llevarle la comida, se murió de inanición. Lo cierto es que cuando por fin me regalaron el juego intenté por todos los medios romperle la pierna a mi Sim sin conseguirlo, pero eso no me desanimó. Los Sims estaba lleno de posibilidades y poco a poco me enganché primero a sus vidas controladas, luego a su capacidad de crecer y después a las preciosas recompensas que obtenías al llegar a la cúspide de tu carrera profesional.
Hasta que llegó Los Sims 4.
¿Qué hace interesante a Los Sims 4? En dos palabras: sus aspiraciones
Los Sims 4 no ofrece realmente muchas novedades frente a Los Sims 3 y de hecho hay una enorme comunidad de nostálgicos (entre los que no me incluyo) que insistían en que Los Sims 3 era
mejor. La nueva edición nos permite seleccionar aspiraciones para nuestros Sims y obtener recompensas como pociones rejuvenecedoras y otra serie de ítems que antes solo se podían obtener empleando códigos y trucos. Lo cierto es que las aspiraciones te dan un objetivo a perseguir y eliminan un poco la sensación de tedio y monotonía que producía el hecho de levantar cada mañana a tu Sim para completar el pentagrama de: vejiga, higiene, hambre, diversión y al trabajo hasta que llega el fin de semana. Para vivir una vida tan aburrida y monótona no necesito Los Sims.
Las aspiraciones de Los Sims van en tres niveles y cuando consigues cumplir con todos y cada uno de los puntos te otorgan un buen puñadito de puntos que gastar en recompensas. Pero llega un punto en el que el hecho de ir cumpliendo uno tras otro requisitos como «trepar por las barras estando vacilón» o «conocer a una nueva persona» no es suficiente para mantener nuestro interés. Es entonces cuando entran en juego las expansiones.
Las expansiones de Los Sims 4
Antes de hablar de Los Sims 4 Perros y Gatos dejadnos que os expliquemos las diferencias principales entre los diferentes packs y expansiones del juego.
Por un lado tenemos los packs de accesorios. Estos incluyen simplemente objetos especiales bajo una temática y prendas/outfits únicos para tus Sims. Los hay de todo tipo: infantes con ítems para vestir a los niños, pack de fitness, glamour y vintage, noche de bolos, etc. Estos packs de accesorios que en realidad añaden solamente opciones de decoración, cuestan solamente 9,95€, un precio razonable para todo lo que traen.
También están los packs de contenido, expansiones que por 19,95 te incluyen una gran cantidad de posibles acciones, ítems y diseños únicos. Por ejemplo, en el pack de contenido Papás y mamás, podrás dar forma a la personalidad de tus hijos alentando sus comportamientos o riñéndoles cuando realizan alguna travesura; la expansión de contenido de vampiros permite transformar a tus Sims en vampiros, visitar una nueva ciudad llamada Forgotten Hollow y desarrollar poderes sobrenaturales. Es decir, que le aportan nuevo contenido y nuevas formas de interactuar a tus Sims, haciéndolos más divertidos.
Y por último, los packs de expansión como Los Sims 4 Perros y Gatos que aportan nuevo contenido, interacciones, barrios e ítems y que precisamente por eso cuentan
Los Sims 4 Perros y Gatos: no se llama animales a raudales porque de animal tiene poco.
Los Sims 4 Animales a raudales es, como tal el primer pack importante de expansión del juego y precisamente por eso tiene un precio superior. Lo primero que salta la vista a la hora de jugar a los Sims 4 Perros y Gatos es la increíble capacidad de personalización que tenemos para cada una de nuestras mascotas. Podemos variar tanto a nuestro perro y gato que fácilmente podremos realizar una réplica de nuestra mascota real a la que cuidar. Las posibilidades ascienden a cientos, permitiéndonos variar desde la longitud de las patitas hasta el hocico de nuestro animal de compañía. Además, también podremos otorgarle rasgos como «juguetón» o «protector» que le darán el toque ideal.
Pero a partir del momento en el que tu mascota llega a tu casa, ya sea con el editor de la unidad familiar o adoptándolo por teléfono, entonces empiezas a ver la limitada cantidad de
opciones que tienes con ellos. A diferencia de la expansión Animales a raudales de Los Sims 3, Los Sims 4 Perros y Gatos no incluyen otros animales como iguanas, tortugas, caballos y pájaros. Es cierto que estos animales no tenían realmente muchas interacciones, pero se les sigue echando de menos. A cambio, Perros y Gatos incluye en el interior de los perros la posibilidad de crear mapaches y zorros que se comportan, a todos los efectos, como un perro normal y corriente.
Una vez tenemos al animalito en nuestra casa llega el momento de lanzarse a las compras compulsivas. No sé si en la vida real tenéis animales, pero cuando me hice con mi cachorro tuve un ataque en el interior de un Kiwoko y varios mercados chinos en los que le compré todo tipo de platitos de comida, camitas, juguetes, correas extensibles y de cuerda, collares y arneses, pelotas masticables, premios y todo tipo de objetos variopintos con los que interactuar con mi cachorrito. Al fin y al cabo, existe una parte del marketing destinado única y exclusivamente a las mascotas. Si alguna vez os habéis perdido por los pasillos de mascotas de un hipermercado veréis que la cantidad de opciones es simplemente abrumadora.
Pero nada de esto lo veremos en Los Sims 4 Perros y Gatos. La cantidad de objetos que te ofrecen para una expansión que vale casi tanto como el juego original es simplemente ridícula: tenemos sólo dos variedades de comederos, dos variedades de camitas y un par de arenas para nuestros gatos. Es cierto que incluyen pequeñas pelotas que se pierden por toda la casa y varias estructuras para entrenar a nuestro perro en affinity, pero aparte de eso, los ítems se quedan cortos, muy cortos. Es evidente que con la política de EA, no tardaremos en ver anunciada un pack de complementos lleno de comederos, bebederos y otros juguetitos con los que complementar a nuestras pets.
Las interacciones con nuestras mascotas son muy limitadas: podemos jugar con ellos y adiestrarlos, aumentando un nuevo punto de habilidad de adiestramiento al que pueden acceder nuestros Sims. Estos puntos de adiestramiento serán importantes a la hora de ascender en la profesión de adiestrador a la que tendremos acceso, pero no garantiza el buen comportamiento de nuestra mascota. Si queremos que nuestro perro / zorro / mapache deje de ladrar, tendremos que esperar a que haga algo que no queremos que haga y reñirle. De nuevo, las opciones frente a Animales a raudales son mucho más limitadas, en las que podías incluso poner a trabajar a tu perro y hacer que ascienda como otro miembro activo de la familia.
La introducción de una veterinaria no es suficiente
Entonces ¿qué tiene de especial frente a la anterior expansión Perros y Gatos? En este caso serían las veterinarias: ahora nuestros Sims pueden hacerse emprendedores y, por menos de 6000 simoleones, abrir una veterinaria. Para ello tendremos que adquirir un solar y construir nuestra clínica o hacernos con una casa y seleccionar tres rasgos que la hagan atractiva y que aporten un boost a nuestro negocio. Antes de abrir tendremos que hacernos con un puesto de admisión, una mesa de reconocimiento, una papelera y una mesa de cirugías. A partir de ese momento, en cuanto abramos la clínica, podremos empezar a recibir a nuestros primeros clientes.
De nuevo, la cantidad de objetos que nos ofrecen para decorar la clínica es simplemente ridícula: dos mesas de reconocimiento que no varían en nada en su diseño, pero que sí que tienen varios miles de simoleones de diferencia entre una y otra. Nos dan la posibilidad de crear una señal exterior y nos entregan una decena de vinilos que estampar en las paredes. Si sois como yo y os gusta jugar con la vista de paredes reducidas al 100%, entonces las pegatinas poco o nada aportan a la decoración de nuestra clínica.
Siempre podemos ponernos creativos y añadir un sofá, una mesa de café y una mesa con un ordenador para que los clientes que tengan que esperar no se impacienten demasiado. Además, conforme vayas atendiéndolos, estos irán poniendo valoraciones al más puro estilo de Trip Advisor y Yelp. En ellas valorarán el nivel de estrés, los tiempos de espera o lo nerviosas que estaban sus mascotas cuando las atendiste. De una forma similar a Theme Hospital y otros juegos de Tycoon, los clientes irán llegando sin que tengas que hacer nada por promocionar tu negocio.
La programación y las mecánicas en cuanto a gestión de negocio no están explotadas ni trabajadas. No hay diferencias significativas entre la cantidad de pacientes que llegan cuando tienes una estrella roja y cuando tienes cinco doradas. Tampoco cuentas con ninguna regulación en cuanto a tiempos de apertura: si quieres tener a tus empleados trabajando 3 días seguidos y no cerrar nunca tu clínica para dejarles marcharse a casa a trabajar, puedes hacerlo. Es cierto que su nivel de estrés aumentará y que te darán un rendimiento peor en cuanto a su velocidad de tratar a los clientes, pero técnicamente puedes conseguirte a todos los trabajadores forzosos que quieras sin muchas represalias.
El procedimiento para tratar a tus clientes es siempre el mismo y se vuelve muy repetitivo. El hecho de que tengas la habilidad veterinaria alta lo único que te reporta es que te permite diagnosticar enfermedades más rápido y, por tanto, tratar a más clientes. A partir de entonces comienza un bucle repetitivo: saludar al cliente de forma calurosa > examinar al animal (consultar diagnóstico, pelo y ojos… etc) > calmar al animal > tranquilizar al dueño > seleccionar el tratamiento que tiene un icono de thumbs up verde al lado. La única variación posible es cuando no hay un tratamiento recomendado para el animal que tendrás que llevarlo a cirugía.
La parte divertida de tener un negocio es poder gestionarlo tú mismo: enfrentarte a avalanchas de clientes, a impuestos e impagos, a diferentes problemas relacionados con el crecimiento de tu marca. Pero en una semana fuimos capaces de llevar nuestra veterinaria del lodazal al local más concurrido de todo el barrio sin necesidad de contratar a demasiado personal ni molestarnos nosotros mismos. Otro detalle que realmente me molestó fue el hecho de que no puedes llevarte tu mascota contigo a trabajar y que tampoco puedes contratar a un servicio de limpiezas para el local. Los perros y gatos que vienen suelen dejarlo todo asqueroso, por lo que no te quedará más remedio que contratar a alguien con un perfil poco cualificado y darle la orden de que se dedique a limpiar todo el tiempo.
Al cabo de unos días, cuando te das cuenta de que tu Sim tiene una rutina aburrida sin nada de sorprendente, acabas dejándole la veterinaria a tus empleados y volviendo a casa. Nadie lo hará igual de bien que tú pero al final del día ¿acaso importa cuando ya te has aburrido de las opciones que te ofrece?
Conclusión sobre Los Sims 4 Perros y Gatos
Es inevitable comparar la expansión Animales a Raudales de Los Sims 3 con los Sims 4 Perros y Gatos y la verdad es que en una comparación justa, esta última no sale favorecida. Los Sims 4 ofrece solo dos tipos de animales: perros (que puedes customizar para que parezcan mapaches y zorros) y gatos. Además, la cantidad de ítems que incluye la expansión para permitir que tus mascotas coman, duerman o jueguen es extremadamente limitado para el precio del juego.
Para añadir una novedad, Perros y Gatos introduce la posibilidad de crear una veterinaria que puedes gestionar tú mismo o dejarla en manos de empleados. La veterinaria, al igual que el resto, carece de suficientes objetos con los que decorarla apropiadamente y, al cabo de un par de horas, la falta de elementos sorpresa y las limitadísimas mecánicas de gestión de un negocio lo vuelven repetitivo y bastante tedioso.
Es una expansión más que puedes adquirir si te apasionan Los Sims 4 y estás en un momento de compra compulsiva, pero definitivamente, no merece la pena los 40€ que piden por él.