Desde Microsoft confirman que siguen trabajando en mejorar la velocidad de respuesta de Kinect.
Si el dispositivo de control de movimiento de Microsoft, Kinect, tiene algún punto débil, es el resultado de latencia y/o problemas de retraso existentes entre los movimientos del jugador y la respuesta obtenida en el juego. Es por ello que la multinacional norteamericana sigue trabajando para pulir esos detalles que «desesperan» a más de un jugador (ya sea exigente o no) mediante nuevos estudios de investigación.
Microsoft se ha hecho eco de la cantidad de comentarios negativos al respecto y, pese a que siempre han defendido que la respuesta de los movimientos del jugador es similar a la misma obtenida tras pulsar un botón de un mando, siguen investigando al respecto para mejorar ese aspecto que puede resultar desagradable, ya que es necesario incluso «predecir» la jugada para adelantarse a ésta.
Creando nuevas vías de desarrollo implementadas para Kinect, han conseguido crear una nueva tecnología presentada por Microsoft Research en Cambridge que sí podría acelerar notablemente la forma en que Kinect reconoce los movimientos.
La novedad de este sistema radica en la «profundidad en mapas 3D» que es capaz de hacer distinciones de cada una de las partes de nuestro cuerpo, como por ejemplo, los brazos, las piernas y el torso, hombros, pecho, ojos, rodillas, etc. Básicamente es un nuevo sistema de Inteligencia Artificial que identificará todas las partes de nuestro cuerpo analizando todas las variables que implica cada tipo de jugador.
Os adelantamos un vídeo donde podéis observar de primera mano el estudio que nos ocupa, así como el desarrollo de las investigaciones.
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