Desde que Switch llegó al mercado hemos sido testigos de como Nintendo ha cambiado su actitud de cara al catálogo de su consola. Desde aquella promesa de AAA al mes que a día de hoy sigue cumpliéndose correctamente, la compañía nipona tampoco a perdido visión periférica y sigue nutriendo la consola de títulos indies varios y ,como no, de ports para su consola de juegos multiplataformas. El juego del que hablaremos hoy es uno de esos ports deportivos que llega de la mano de Milestone y no es otro que MXGP3, el juego de motocross del campeonato oficial para Nintendo Switch.
A enfundarse el casco y calentar motores
MXGP3 es la nueva entrega de la compañía italiana que se encarga de traernos año tras año el juego de motocross de turno que cuenta con las licencias oficiales del mundial para pilotos, escuderías, motos y circuitos. Pese a que el juego cuenta con un montón de detalles y opciones que lo intentan hacer más realista, lo cierto es que estamos ante un título que poco tiene de simulador y que llega a Switch lastrando los errores de las demás versiones añadiendo los propios de un port que acusa excesivamente las evidentes limitaciones de la consola.
La conducción es poco realista. Pese a que podremos hacer diversos ajustes que limiten las ayudas que se nos proporcionan, lo cierto es que el simple hecho de conducir se siente extremadamente sencillo. Podremos derrapar, equilibrar la frenada trasera y delantera, maniobrar en el aire para ajustar la caída y realizar saltos para la galería. Pero todo esto se ve empañado por una increíble sencillez en el control y la poca exigencia del mismo, algo que sumado a una IA no demasiado trabajada puede producir que nos aburramos rápidamente de lo que nos puede ofrecer el juego.
Esta sencillez y falta de realismo tienen una evidente explicación. MXGP3 no es un juego que busque ser un simulador, pero pese a ello, es de recibo exigirle un mínimo en cuanto a la sensación de controlar una moto, algo que se ve muy penalizado por un deficiente sistema de físicas. Choques contra otros pilotos, aterrizaje después del salto, derrapes… Las reacciones del conductor y la moto no se ajustan en absoluto a la realidad, algo que junto a algunos problemas técnicos y bugs que nos hemos encontrado (como la reubicación al salirnos de pista) sacan constantemente al jugador de la experiencia.
El mundial de motocross llega a Nintendo Switch
MXGP3 es el juego oficial del campeonato oficial de motocross, por lo que en el aspecto licencias es un juego que lo borda. Los mas fans de este deporte estarán encantados de poder disfrutar de las diferentes categorías MXGP y MX2, cada una con sus tipos de motos regladas dentro de los cc que acepta cada disciplina. Dentro de estas categorías tendremos a los pilotos y equipos oficiales del mundial, con personalidades reconocidas dentro del mundillo como Jeffrey Herlings o Tim Gajser.
Además de contar con una cantidad ingente de pilotos también tendremos todos los circuitos oficiales y las marcas mas famosas del sector, entre ellas las conocidas japonesas Yamaha, Honda, Suzuki y Kawasaki. El aumento de cilindrada afectará al estilo de la conducción y a la velocidad, aunque no todo lo que nos gustaría, eso junto a los evidentes problemas jugables provoca que tampoco lo notemos demasiado.
Una de las facetas para la que parece haberse puesto bastante interés en esta entrega es la conducción bajo el efecto de diferentes climatologías (lluvia, niebla, despejado…) que en algunas carreras veremos como cambian en tiempo real y modificaran en cierta medida los efectos de la conducción. Debemos decir que en este aspecto el juego crea efectos bien logrados, aunque ni de lejos tanto como el de las otras versiones del juego, siendo en Switch donde mas problemas de carga de texturas y menos nitidez encontraremos.
El juego trae consigo varios modos de juego, pero sin duda nuestro favorito es el modo Trayectoria, el más divertido y reconfortante de cuantos hay. En él crearemos a nuestro propio piloto desde cero y comenzaremos su carrera dentro del mundillo: fichaje por un equipo, reglaje de nuestra moto, diseño del mono, publicidad, etc…
Es divertido personalizar todo cuanto tenga que ver con nuestro piloto y su moto, ya que veremos cierta progresión en él a la par que nuestra. Durante esta trayectoria como pilotos profesionales deberemos afrontar todo tipo de pruebas, carreras y participar en competiciones que nos ayudarán a ganar más fama y dinero, lo que nos permitirá acceder a más y mejores artículos que podremos comprar. Accesorios para nuestra moto, cascos, monos, gafas… todo ello inspirado en diseños reales de marcas conocidas. Pese a todo esto, y como todo en este juego, parece que el modo deja de dar de sí bastante pronto y cae rápidamente la repetición, ya que después de todo ninguna de las decisiones que tomemos parecen ser realmente relevantes y todo se reduce a “vestir” a nuestro piloto.
Un port un tanto defectuoso
Esta versión de Nintendo Switch como hemos dicho arrastra más errores que el resto de versiones. Uno de los más molestos sin duda es el popping y los fallos en la carga de texturas. Dejando de lado que ver popping en un juego de conducción debería ser totalmente inadmisible, los fallos en la cargas de texturas es de esos problemas graves que nos sacan totalmente de la experiencia, viendo como incluso en el garaje los artículos que nos probemos tardan en cargar tanto como las texturas de objetos del escenario (como la línea de meta). Gráficamente decae muchísimo con respecto a las demás versiones y se siente un juego de segunda o tercera línea, ya que aunque la consola de Nintendo no sea la más potente del mercado, sabemos que el potencial que tiene da para bastante más.
Los efectos de sonido son poco realistas: tanto en la moto como los del escenario y clima. El juego cuenta con pocos temas que integran su BSO, pese a que todos ellos bien seleccionados, por ello no será extraño que rápidamente nos de la sensación de estar escuchando siempre el mismo. Las diferencias de jugar en modo portátil o Dock son mínimas, presentando quizás un mejor aspecto en el modo portátil donde será un poco más fácil no fijarnos constantemente en sus carencias.
Conclusiones de MXGP3
MXGP3 llega a Nintendo Switch con más pena que gloria. Pese a lo renovado de su aspecto gráfico en otras versiones y las otras novedades que haya podido traer, en la consola de Nintendo los fans del motocross se tendrán que conformar con un mal port, hecho rápido y a correr. Quizás como juego arcade de conducción pueda estar a la altura si lo que queremos es echarnos unas carreritas rápidas. Pero si lo que queremos es un buen juego de conducción y un simulador que disfrutemos plenamente en nuestra pequeña consola, de momento tendremos que seguir esperando. Los errores técnicos y algunos de diseño han lastrado un juego que tenía mucho ganado en el tema licencias y que a nivel de personalización no está nada mal. Una pena que no sea todo lo que ha podido ser.
https://www.youtube.com/watch?v=252LM2e9x6I