Seguramente todos vosotros sabréis o como mínimo habréis oído hablar sobre el famoso Lock-Out de que está sufriendo la NBA, pues este cierre patronal de la competición, está afectando de forma alarmante al sector de los videojuegos.
Aunque parezca mentira, no es lo mismo disfrutar de un juego en el que tenemos una competición real en la que fijarnos, que si esta competición no existe, pues esto es lo que está pasando con el espectacular título de 2k Sport este año.
Hay muchos interesados en que el Lock-Out se solucione de una vez por todas, hasta el punto que el juego NBA 2k12 está financiando de forma indirecta el sueldo del abogado de los jugadores de la NBA y como ya suponéis, no es un abogado de tres al cuarto y mucho menos de oficio, dicho abogado de nombre, David Boies, cobra alrededor de unos 1000 dólares la hora de trabajo.
Pero no penséis que 2K Sport está pagando este pastizal, en realidad, son los propios jugadores los que lo hacen, ¿cómo?, muy fácil. Los jugadores han renunciado a sus inversiones por derechos de imagen (aquí es donde entra NBA 2K12) y dicho dinero, en vez de ir directamente a sus cuentas corrientes (es irónico llamar «corriente» a sus cuentas cuentas corrientes ¿no? …), este dinero va a pagar al mencionado abogado. Así están las cosas.
Menos mal que afortunadamente, hoy por fin han llegado a un acuerdo ambas partes para que la temporada de comienzo el próximo día 25 de diciembre. Esto quiere decir que los aficionados a este deporte volveran a poder disfrutar de este deporte y por supuesto, 2k Sport se sentirá muy aliviada de que la competición que lleva el nombre de su juego se ponga en marcha.