Hace menos de una década el modelo de negocio que dominaba la industria de videojuegos era la venta de videojuegos independientes por un precio que rondaba los $50-$60. Pero la estrategia ha venido cambiando en la medida en que los videojuegos se han alejado de formatos exclusivamente para consolas, migrando hacia plataformas digitales y dispositivos móviles.
Las plataformas de juego y los juegos que se descargan gratuitamente son cada vez más populares. Y es que la forma en que los jugadores interactúan con los juegos también se ha transformado significativamente.
Durante el auge de los videojuegos para consola y para PC, hacer una compra dentro del juego era una rareza, pero el éxito de FarmVille evidenció que en este modelo de negocio había un enorme potencial.
FarmVille fue un videojuego basado en Facebook que incorporaba microtransacciones y que, en su apogeo en 2010, exhibía más de 83 millones de usuarios activos. El desarrollador de este juego, Zynga debió cerrarlo debido a que Facebook dejó de admitir juegos Flash Player cuando Adobe anunció que dejaría de distribuir y actualizar esta aplicación.
El modelo de negocios Free-to-Play no es exclusivo de la industria de videojuegos, sino que también está presente en la industria de casinos online. Es el caso de las tragamonedas con progressive jackpot que funcionan tomando una porción de cada apuesta para agregarla al premio mayor el cual seguirá creciendo progresivamente cada vez que alguien juega hasta el momento en que haya un ganador que se lleva todo el premio.
Qué es el modelo Free to Play
El modelo de negocios Free to play (F2P), muy utilizado en la industria de videojuegos, se refiere a una estrategia comercial que permite el acceso gratuito al juego, pero la monetización se produce de múltiples formas, como la venta de expansiones del juego, pago de actualizaciones, habilidades especiales para avanzar que son vendidas, artículos y más.
Este modelo de negocios se centra en la voluntad de los jugadores de pagar para comprar artículos o acceder a nuevos contenidos y personajes, luego de haber probado el juego gratuitamente.
Los juegos Free to Play son cada vez más y de mejor calidad, dado que los desarrolladores han descubierto su capacidad para generar ingresos. Los desarrolladores y distribuidores de videojuegos todavía trabajan para lograr la optimización de este modelo de negocios, como ofrecer versiones gratuitas y de pago al mismo tiempo.
Por ejemplo, juegos muy populares como Fornite y Call of Dutyestán usando este modelo de negocios y las compras dentro del juego están generando cada vez más ingresos para Activision Blizzard y Take-Two Interactive.
Los juegos Free-to-Play han demostrado ser una verdadera mina de oro para sus desarrolladores y distribuidores y esto se está reflejando en sus estados financieros. De manera que es probable que cada vez sean más los juegos que incorporen el modelo Free-to-Play y esto es lo que están diciendo importantes actores de la industria como Kevin Chou, directivo de la empresa estadounidense de videojuegos Kabam, que asegura que no solo los juegos móviles, sino todos los videojuegos se convertirán hacia este modelo.
Todo parece indicar que así será.