Hace unas semanas os traíamos las impresiones de Tennis World Tour 2, el nuevo título de la franquicia de Big Ant Studios junto a Nacon Games. Hoy finalmente, coincidiendo con su lanzamiento, hemos podido analizar su versión completa.
Tras años de pedir un simulador de tenis competente, y es que prácticamente todos los deportes mayoritarios tienen el suyo, teníamos fe en esta secuela. Si bien es verdad que la primera hacía aguas, esto no eclipsaba nuestra esperanza.
El resultado final que llega a nuestras consolas tiene demasiados claroscuros para ser considerado un buen simulador. Ahora bien, sin ser un gran juego, la sensación que tenemos todo el tiempo es que “no está tan mal”, y a continuación os contaremos el porqué.
Al borde de la doble falta
La jugabilidad es el punto clave en cualquier juego de tenis que se precie. Los sucesores espirituales de juegos como Pong tienen que basar su calidad en lo bien que transmiten las sensaciones.
Evidentemente, cuanto más se complejiza el juego, más variables hay que tener en cuenta y más importantes son elementos como el timing, las animaciones o como responda nuestro jugador a nuestras órdenes.
El caso de este Tennis World Tour 2 es el de el clásico juego que lo intenta pero no llega. Hablamos de un título tosco, torpe por momentos y que no es lo suficientemente frenético como para ser arcade, ni lo suficientemente realista como para ser una buena simulación.
Ahora bien, es divertido. Si algo tenía su primera parte, es que era tan frustrante que no llegabas a pasártelo bien jugando. Este es frustrante sí, pero también es disfrutable, sobre todo si no pretendes tomártelo especialmente en serio, o eres un jugador muy exigente.
Como decimos, las animaciones no son del todo fluidas y muchas veces se interrumpen. Esprintar y golpear es misión imposible. La impotencia por no darle a una bola fácil es habitual. Pero aún así, cuando controlamos un poco el saque (satisfactorio e intuitivo), y el timing de golpeo a la pelota, podemos hasta pasárnoslo bien.
A partir de ahí todo es intentar pulir habilidades y enfocar el juego de nuestro tenista. Evidentemente tendremos la ya clásica variedad de golpes (liftado, plano, dejada…) y que bien gestionados pueden dar versatilidad a cada punto. No es un juego muy profundo, ni siquiera satisfactorio en todo momento, pero sí consigue que los partidos sean entretenidos e incluso, si la IA quiere, desafiantes.
Decimos que si la IA quiere, porque una vez más es el caballo de batalla de este Tennis World Tour 2. Como no, en un mismo juego, nuestro rival puede pasar de no darle a una pelota que le pasa a 50 cm, a meterte un revés cruzado en la línea. Y eso frustra muchísimo. Por lo, que mientras no se arregle, para pasarlo realmente bien la mejor opción es jugar tanto online como offline contra otros jugadores.
El principal elemento novedoso es el de las cartas, las cuales funcionan a modo de potenciadores que podemos ir usando durante los partidos. Originalmente se había concebido como un sistema pasivo que se activaba bajo ciertas condiciones, sin embargo ahora seremos nosotros quienes escogeremos cuando usarlos. Estos nos darán fuerza o precisión, y tienen usos limitados, por lo que tendremos que comprarlos con dinero virtual. Aunque entretenido, hay que reconocer que se carga bastante esencia de la simulación, acercándose peligrosamente al concepto “power-up” que desvirtúa los partidos.
Un contenido más de Master Series que de Grand Slam
Limitado. Esa es la palabra que mejor define la cantidad de contenido que nos ofrece este Tennis World Tour 2. Parece suficiente, pero si pensamos que juegos como la saga Virtua Tennis ofrecía tantas o más opciones, pues se queda corto.
Como modo central de un jugador, tenemos el modo carrera, en el que tendremos que llevar a nuestro jugador a lo más alto del ranking. Tiene cierta variedad, tanto en las opciones como en los minijuegos, pero aún así se queda bastante escaso. También tendremos torneos, la academia y tanto modo online como offline. Sí que es suficiente para lo que se puede pedir a un juego de tenis, pero se echan en falta más opciones.
Respecto a tenistas, contamos con grandes figuras del panorama mundial como Federer, Nadal, Muguruza, Thiem o Caroline García. En ese sentido, el juego está bastante bien surtido, y únicamente echamos en falta gente como Novak Djokovic, por ejemplo.
A nivel licencias de torneos, si que nos encontramos una propuesta mucho más floja. Contamos con gran variedad de pistas y superficies licenciadas, pero en lo que a torneos oficiales se refiere se queda muy cojo.
Un tenis de la vieja generación
En cada uno de los apartados que estamos viendo se ve reflejado que este Tennis World Tour 2 es un “quiero y no puedo”. Pues bien, obviamente el apartado gráfico sigue una línea similar. En pleno 2020 estamos recibiendo un juego que sería puntero en 2013, y si aún encima hablamos de un juego no demasiado exigente, pues defrauda.
El diseño de los jugadores no es malo, pero falta una cantidad de polígonos importante. Se distinguen, pero no lucen. Con las pistas, el entorno o el público pasa un poco lo mismo, pero al menos se disimula mejor durante los partidos.
Las animaciones no están demasiado logradas, los movimientos no acaban de verse naturales… como decimos, sería aceptable hace un lustro, a tales alturas se exige más. Desde luego, las expectativas eran más altas para un juego que prometía heredar el trono de los simuladores de tenis.
A nivel técnico no responde mal. En un pc de nivel medio consigue llegar a 1080p y 60 FPS, e incluso a 4K bajando algo la calidad gráfica. No da tirones, es perfectamente jugable… en ese sentido cumple perfectamente. Igualmente pasa con el sonido, que sin lucir, le va bien al juego.
Conclusiones Tennis World Tour 2
Parece que va a tocar seguir esperando por el mesías del tenis. Pintaba bien, desde luego hay mejoras respecto al primero, pero sigue quedándose lejos de lo que todos los fans estaban pidiendo.
Ahora bien, es divertido, disfrutable en su justa medida y menos frustrante que su primera entrega. Tennis World Tour 2 cojea en todos los aspectos, pero al menos camina, algo que no se vislumbraba en su fase beta.
Si eres fan del tenis y de la simulación (si te gusta también el arcade y tienes una Nintendo Switch siempre es una mejor opción la del fontanero), puedes darle una oportunidad. Quizás te defraude si tienes muchas expectativas, ahora bien, si lo tomas como un juego mediocre pero que te puede dar unas cuantas horas de diversión, es una opción a tener en cuenta para tu biblioteca.
Nota: 5.5
Lo mejor
- Un salto respecto al primero
- Puede resultar divertido a pesar de sus carencias.
Lo peor
- Flojo en absolutamente todos sus apartados.