Gracias a la invitación de Bigben Interactive, la semana pasada pudimos viajar a la capital de Hungría, Budapest, para sumergirnos en uno de los universos distopicos mas conocidos y queridos de la ciencia ficción, el universo de Warhammer 40.000. Esta visita nos llevó a las oficinas de Neocore Games, el estudio de desarrollo de uno de los títulos de esta franquicia que verá la luz en un mes, Warhammer 40.000 Inquisitor Martyr. El título ya fue lanzado hace unos meses en su versión de Steam Early Access, pero con el apoyo de la editora, llegará también a consolas. Y es esta nueva versión la que hemos podido probar en exclusiva.
Primeras Impresiones de Warhammer 40.000 Inquisitor Martyr
En el milenio 41 nos enfrentamos a sagrada misión de acabar con los enemigos de la humanidad, herejes adoradores de los dioses del caos, situados en el sector de Caligari. Warhammer 40.000 Inquisitor Martyr nos permitirá vivir esta experiencia de lucha contra el caos desde una de las posiciones mas importantes y poderosas de su universo. El juego nos pondrá en la piel de un miembro de la inquisición imperial, una organización secreta con plenos poderes para actuar a su discreción la cual solo tiene que responder ante el Dios-Emperador de la humanidad.
En este videojuego de rol de acción, o ARPG para los mas versados en la materia, nos enfrentaremos a un sistema de juego similar al que podemos encontrar en Diablo III. Una acción frenética pasillera donde nuestro objetivo variara según la misión elegida antes de entrar, lo que si que os puedo garantizar son luchas épicas contra hordas de monstruos las cuales nos pondrán en serios aprietos sino jugamos con las coberturas.
Dentro del juego podremos elegir entre varias clases de personajes, de las que pudimos probar fueron:
- Cruzado: un personaje con una gran resistencia física cuerpo a cuerpo pero con poca movilidad, vendría a ser el tomador del rol de tanque.
- Asesina: gran movilidad y capacidad de daño serian sus principales características, una dps en toda regla.
- Psíquico: como dice su nombre personaje que usara los poderes psíquicos que le otorga la disformidad para enfrentarse a las amenazas del imperio.
En mi caso, he de decir que el personaje que mas disfrute fue el Psíquico, su capacidad de paralizar a todos los enemigos con su habilidad especial era capaz de cubrir esa falta de habilidad a la hora del juego. No es que se trate de un juego complicado, pero si que es un juego muy complejo al cual para disfrutarlo en su plenitud es necesario dedicarle un tiempo, no estamos ante un juego casual. Pero no son solo las clases el principal diferenciador del estilo de juego, sino las armas que elegimos para nuestros personajes, puesto que estas serán las que marquen las habilidades de nuestro personaje así como su estilo de juego.
El detalle en los mapas nos hace una llamada directa a la escenografía que podríamos encontrar en cualquier partida del juego de mesa pero llevada a un nivel de detalle nunca antes imaginado. Un gran detalle a tener en cuenta, y que hará el grindeo de items mas llevadero, es su sistema de generación de mapas aleatorio. Este hará que cada vez sea completamente distinto, tanto en la disposición de sus salas, como de sus enemigos y tipo de escenografía que nos encontraremos.
Este tipo de generación de mundos marca un aspecto fundamental del juego y no es otro que sus sistema de cámara libre el cual aparte de permitirnos el disfrute de una partida mas inmersiva. Nos da la posibilidad de jugar de forma mas estratégica con el uso de las coberturas así como analizar las rutas de los enemigos.
Antes de lanzarnos a la misión el juego tomara en cuenta las estadísticas de nuestro personaje a la hora de recomendarnos misiones aunque no nos marcará un camino a seguir explicito.
Nosotros, como jugadores, tendremos libertad absoluta a la hora de decidir que retos afrontar y como lo haremos. Es mas, tras haber hecho un par de misiones tutorial al inicio del juego, somos nosotros los que decidimos si queremos seguir esa historia o no. El juego solo nos asesorara mediante un código de colores en el nivel de las misiones que nos dará.
El apartado técnico del juego sorprende en la cantidad de posibilidades que da al usuario, dando la posibilidad de elegir el acabado gráfico y el rendimiento que queremos para este puesto que se nos permite elegir entre tres niveles:
- Perfomance, en el que los acabados del juego de ven damnificados en favor de una mayor tasa de frames por segundo.
- Balance, donde se llega a un termino medio entre rendimiento y acabado visual
- Max settings, es en este apartado donde el juego saca todo su trabajo visual a relucir pero a cambio la fluidez de la experiencia se ve afectada.
Hay que reconocer como un juego con una dependencia tan seria de la capacidad de trabajo de una CPU pueda moverse tan bien en consolas debido al alto numero de partículas y acciones que debe de controlar. La versión que pudimos probar fue en PS4 Pro, donde todos los settings se movían con bastante fluidez aunque no pudimos obtener de forma objetiva el numero de FPS.
Un detalle que si que llama la atención fue la posibilidad del juego cooperativo local, en una consola y en una misma partida. En este juego aparte del clásico multiplayer online podemos disfrutar de jugar con un compañero que este literalmente a nuestro lado. Pongámonos en situación, viene un amigo que no tiene ningún tipo de experiencia en este tipo de juegos pero quiere probarlo y jugar con nosotros, el juego para permitirnos disfrutar de la experiencia sin que ninguna de las partes se vea lastrada por el nivel genera varios personajes de forma aleatoria pero con un nivel definido por el del personaje de la partida anfitriona; por lo que no nos vemos afectados por la aparición en el juego de nuestro compañero mas que el mayor numero de enemigos y unas hordas mas grandes de enemigos.
Puedo decir que todo lo que he visto y probado del juego me ha ilusionado como ex jugador de Warhammer 40.000. Se nota el cariño en el trabajo realizado por Neocore Games y con esto puedo decir que espero con ilusión el lanzamiento del juego para poder hacer un análisis en profundidad.