WWE 2K Battlegrounds – Análisis PS4. La lucha más libre del videojuego

Este está siendo un año atípico en todos los sentidos. Y más allá de temas de salud, para los videojuegos también lo está siendo. Este 2020 ha sido el momento de pausar una de las franquicias más longevas de los videojuegos. Eso sí, los fans de la WWE no se han quedado sin su ración de wrestling, sino que en esta ocasión reciben WWE 2K Battlegrounds, una versión un poco más libre de la disciplina.

El realismo de la saga WWE que nos llegaba de la mano de 2K y Yuke`s queda aparcado hasta su versión de 2022. Mientras, y con toda la esencia que pudimos ver en NBA 2K Playgrounds, nos llega un título que sube una experiencia 100% arcade al cuadrilátero.

Tras el fracaso y desinterés en los juegos principales, 2K ha decidido que la mejor forma era reinventarse y darle un punto distintivo. Sin más preámbulo, y gracias a 2K, os traemos nuestra opinión sobre los golpes y piruetas más desenfadados del panorama de los videojuegos.

Tortas para todos los públicos

Bien es verdad que la saga WWE nunca fue un claro ejemplo de simulación. Sin embargo, dentro de ser una idea más o menos asequible para todos, si que se buscaba cierto nivel de realismo. Con WWE 2K Battlegrounds esto se queda en casa, y tendremos luchas arcade con movimientos imposibles y golpes más de superhéroes que de humanos.

Si habéis jugado a NBA 2K Playgrounds, podréis extrapolar perfectamente su filosofía aquí. Combates espectaculares, vistosos… pero también más limitados. Es la misma disciplina, pero al enfocarla desde otro punto, parece un espectáculo totalmente distinto.

Tenemos todo tipo de golpes, llaves, movimientos especiales… La esencia de cada luchador está plasmada en el juego. Eso sí, siempre con ese punto tan arcade que aporta espectáculo y absurdez a partes iguales. Y es que este apartado cómico es uno de los pilares del título. Aquí nadie se toma en serio a nadie y es un juego hecho por y para disfrutar sin pensar en nada más o buscar mayor profundidad.

Tendremos todo tipo de cuadriláteros, modalidades, objetos con los que destrozar a nuestros oponentes, e incluso la posibilidad de interactuar con el escenario y con elementos tan extravagantes como cocodrilos hambrientos. Todo se vuelve caótico y absurdo, dándole un toque de diversión y frescura que le va estupendamente.

Lo que si choca con esta filosofía, y es algo que estropea parte de la experiencia, es el ritmo del combate. En un título de estas características esperamos combates rápidos y frenéticos. Pues esto no acaba de ser así. Al final las peleas se acaban viendo lentas, toscas, y lejos de lo que podíamos esperar de esta propuesta. Es entretenido y muy divertido, pero no acaba de tener la clara la esencia, por lo que tenemos un juego bastante descafeinado.

Pártete la cara como y donde quieras

Si bien la jugabilidad tenía algún que otro punto oscuro, hay que reconocer que en lo que a contenido se refiere, pocas pegas se le pueden poner a este WWE 2K Battlegrounds. El título de 2K está tan bien surtido de luchadores como de distintos modos de juego y disciplinas.

Como es de esperar contamos con la inmensa mayoría de las estrellas de la WWE. Podremos disfrutar de grandes como John Cena, The Undertaker, Roman Reigns o Becky Linch, en multitud de arenas distintas, cada una con su personalidad y características jugables diferenciadoras. Además, con sucesivas actualizaciones se irá incrementando la plantilla disponible otorgándonos una variedad de personajes y escenarios magnífica.

Otro de los puntos positivos a este respecto, es que todo este contenido se puede conseguir con moneda del juego. Esta la iremos desbloqueando simplemente jugando en cualquiera de sus modalidades, algo muy de agradecer en medio del mundo de los micropagos.

Respecto a los modos de juego, el modo Campaña es el principal y el que nos ocupará más horas de nuestro tiempo. Como era de esperar, a nivel narrativo no es nada del otro mundo, pero nos permite familiarizarnos con el juego además de conocer a los personajes y sus sets de movimientos. Jugar la campaña también nos proporcionará algún que otro aliciente, como mayor cantidad de monedas o potenciadores para nuestros luchadores.

Este WWE 2K Battlegrounds también nos ofrece combates personalizados en los que luchar en disciplinas tan emblemáticas como Battle Royal, Fatal 4 Way o Hell in a Cell. Además, también contamos con un completo creador de personajes, combates online y un modo desafío en el que podremos crear a nuestra propia superestrella y mejorarla ganando un combate tras otro.

Un wrestling de muñecos

Si bien la jugabilidad es bastante distinta a la saga original, donde primero vemos las diferencias es en su apartado visual. Aquí salta a la vista, valga la redundancia, como el enfoque del título es de todo menos algo serio.

Las grandes superestrellas de la WWE son ahora caricaturas de lo más divertido y sencillo y con un nivel de detalle sorprendente. Todo desborda un punto cómico, colorido y desenfadado, y por supuesto encaja perfectamente con la filosofía del título. A nivel sonoro, nada que mencionar. Una BSO simple, que va perfectamente con el juego además de llegarnos subtitulado y localizado al castellano.

Técnicamente, no se le puede poner demasiados peros. Las animaciones son buenas, la fluidez también… es verdad que hay algún que otro bug, pero si lo comparamos con su hermano mayor, son casi imperceptibles.

Conclusiones de WWE 2K Battlegrounds

En un mundo de juegos cada vez más largos, completos y complejos, a veces se agradece un juego simple y divertido al que echar unas partidas rápidas. Pues bien, este WWE 2K Battlegrounds es el perfecto ejemplo de esto.

Estamos ante un título sencillo, pero cuyos pilares se basan en la diversión y en todas las licencias de la WWE. Todo lo que rodea al juego es un magnífico circo caricaturesco que le da un curioso giro a la saga, y que permite dejar respirar a una franquicia sobreexplotada.

Ahora bien, echamos en falta, dada la naturaleza del juego, un mayor frenetismo en los combates. Estos son toscos, lentos… y al final, un juego de estas características pide más acción y una dosis más alta de caos.

A pesar de esto último, estamos ante una propuesta curiosa, diferente, muy al estilo de NBA 2K Playgrounds. Evidentemente está mucho más limitado que su hermano mayor, pero eso no impide que nos vaya a dar unas cuantas horas de diversión, por lo que deberíamos tenerlo muy en cuenta.

Nota: 7.5