Yelmo Cines vuelve a apostar en 2017 por una variada programación de contenidos alternativos. Con más de 400 pantallas, todas ellas 100% digitales, y 37 complejos repartidos por todo el territorio nacional, Yelmo Cines es pionera en la programación de contenidos inéditos y únicos de música, ópera, teatro, danza y eventos especiales de gran envergadura.
Los aficionados a la danza clásica podrán deleitarse de nuevo con las mejores representaciones del ballet internacional de la mano de las casas más prestigiosas ROH y BOlSHOI y en nuestro Yelmo Cine más cercano en riguroso directo. Aquí podéis ver el programa completo de la temporada 2017-2018, la cual ya ha dado comienzo. Las obras que quedan por estrenar son:
- EL CASCANUECES 5 de diciembre 20:15h.
- ROMEO Y JULIETA 21 de enero 16:00h.
- LA DAMA DE LAS CAMELIAS 6 de febrero 20:15h.
- EL CUENTO DE INVIERNO 28 de febrero 20:15h.
- LAS LLAMAS DE PARÍS 4 de marzo 16:00h.
- CENTENARIO DE BERNSTEIN 27 de marzo 20:15h.
- GISELLE 10 de abril 20:15h.
- MANON 3 mayo 20:15h.
- COPPÉLIA 10 de junio 20:15h.
- EL LAGO DE LOS CISNES 12 de junio 20:15h.
El cascanueces
La joven Clara baja sigilosamente al piso de abajo en Nochebuena para jugar con su regalo preferido: un muñeco en forma de cascanueces. Pero el misterioso mago Drosselmeyer está esperando para llevársela a una mágica aventura. La prácticamente definitiva producción de Peter Wright para The Royal Ballet se ha erigido en una de las más duraderas y encantadoras versiones de El cascanueces.
Con su festiva escenografía de época, sus copos de nieve que bailan y su encantadora magia escénica, el ballet de Lev Ivanov de 1892 se ha convertido en el perfecto entretenimiento navideño, y en la más reconocible de todas las partituras de ballet gracias a la suntuosa y acaramelada música de Chaikovski. Basado libremente en el relato de E.T.A. Homann, el ballet comienza con una animada fiesta navideña y su ambientación victoriana queda reflejada con gran detalle en la escenografía de Julia Trevelyan Oman. La coreografía de Wright incorpora de forma inventiva fragmentos conservados del material original del ballet, incluido el famoso pas de deux para el Hada Confitada y su príncipe. Pero al poner el énfasis en la relación entre Clara y el príncipe cascanueces, la producción también adquiere un emocionante subtexto en referencia al primer amor.
Romeo y Julieta
En Verona, Romeo y Julieta se enamoran perdidamente mientras sus respectivas familias, los Montesco y los Capuleto, mantienen una amarga rivalidad que terminará en una dolorosa tragedia… El antiguo director artístico del Ballet Bolshoi, Alexei Ratmansky, pone en escena el estreno de su producción con una urgencia dramática y una original manera de volver a contar el preciado clásico de Shakespeare. Su brillante y precisa adaptación, ambientada con la romántica y cinematográfica música de Prokofiev, aviva el fuego de la historia de la pareja de amantes más conocida del mundo de la literatura como ningún otro coreógrafo de ballet clásico ha conseguido hasta la fecha.
La dama de las camelias
Tras llegar a París por primera vez, el joven e ingenuo Armando está absolutamente cautivado tras conocer a Margarita Gautier, la cortesana más deseada y deslumbrante. Su encuentro crea un amor apasionado y destinado al fracaso… La novela de Alexandre Dumas (hijo) vuelve a la vida en el escenario del Bolshoi, con Svetlana Zakharova, la bailarina principal, que interpreta a la enfermiza Margarita, en busca del amor y la redención de su vida como cortesana. El Bolshoi ofrece el trabajo del coreógrafo John Neumeier, de una belleza extraordinaria y una profundidad trágica que nos llevan a nuevas emociones, acompañado del romántico piano de Chopin. Grabación en directo del 6 de diciembre de 2015
El cuento de invierno
Christopher Wheeldon, Asociado Artístico de The Royal Ballet, creó su adaptación de El cuento de invierno, la gran obra de última época de Shakespeare, para The Royal Ballet en 2014. Tras el éxito de Las aventuras de Alicia en el País de las Maravillas, El cuento de invierno recibió elogios encendidos tras su estreno, aclamado por crítica y público por igual por su historia inteligente, personal y emocionalmente poderosa, contada por medio de danzas de exquisita calidad. Ahora está ampliamente considerado como un clásico moderno del ballet. La historia cuenta la destrucción de un matrimonio por culpa de unos celos destructores, el abandono de un niño y un amor aparentemente imposible. Sin embargo, por medio del remordimiento y el pesar −y tras un regreso a la vida en apariencia milagroso−, en la conclusión se dan cita el perdón y la reconciliación. Con una poderosa escenografía de Bob Crowley y una música atmosférica de Joby Talbot, El cuento de invierno es un magistral ballet narrativo moderno.
Las llamas de París
En la época de la Revolución francesa, Jeanne y su hermano Jérôme se van de Marsella a París con el objetivo de apoyar la lucha revolucionaria que intenta tomar la capital. Mientras luchan por la libertad, los dos encuentran el amor en el camino… Muy pocas obras de ballet consiguen representar la rebosante energía y la ardiente pasión que desprende el Bolshoi como lo hace Alexei Ratmansky con su cautivadora reinterpretación de Las Llamas de París de Vasily Vainonen. Con una poderosa virtuosidad y algunos de los pas de deux más impresionantes, el Ballet Bolshoi despliega una exuberancia casi excesiva para el escenario de Moscú.
Centenario de Bernstein
Leonard Bernstein fue uno de los primeros compositores clásicos que logró en Estados Unidos un éxito tanto popular como entre los críticos. Bebía de fuentes eclécticas − inspirándose en el jazz y en el modernismo, las tradiciones de la música judía y el musical de Broadway − y muchas de las partituras de Bernstein se adecuan extraordinariamente bien a la danza. Mantuvo una asociación especial con Jerome Robbins, y entre sus colaboraciones conjuntas figuran Fancy Free y West Side Story. Para celebrar el centenario del nacimiento del compositor, The Royal Ballet ha unido a sus tres coreógrafos asociados para celebrar la variedad dinámica y el intrínseco carácter bailable de la música de Bernstein. El programa incluye dos estrenos mundiales del Coreógrafo Residente Wayne McGregor y del Asociado Artístico Christopher Wheeldon, que supone la primera incursión en Bernstein de ambos artistas. En el centro del programa figura la primera reposición de The Age of Anxiety, del Artista Residente Liam Scarlett, creado en 2014 a partir de la introspectiva Segunda Sinfonía de Bernstein. Tanto la sinfonía como el ballet se inspiran en el magistral poema modernista de W. H. Auden, escrito en respuesta al ambiente de desilusión e incertidumbre que se respiraba tras el final de la Segunda Guerra Mundial.
Giselle
Cuando Giselle descubre que su amado Albrecht está comprometido con otra mujer, se le rompe el corazón y muere en sus brazos. Mientras Albrecht llora por su muerte, ella regresa de entre los muertos como una Willi, un espítiu vengativo que hace que los hombres infieles bailen hasta la muerte… La bailarina principal Svetlana Zakharova encarna este importantísimo papel para una bailarina de repertorio clásico, junto al sensacional Sergei Polunin en el papel de Albrecht, en este ballet escalofriante y, a la vez, lleno de luz, que sigue fascinando al público del Bolshoi desde hace más de 150 años. Grabación en directo del 11 de octubre de 2015
Manon
La fuente de Kenneth MacMillan para Manon fue la novela del siglo XVIII que ya había conocido adaptaciones operísticas de Massenet y Puccini. El estreno se produjo el 7 de marzo de 1794, con los papeles protagonistas bailados por Antoinette Sibley y Anthony Dowell. El ballet se convirtió rápidamente en un puntal del repertorio de The Royal Ballet, y en una piedra de toque de la danza adulta y dramática. MacMillan encontró una nueva empatía con la caprichosa Manon y su lucha por escapar de la pobreza. Los decorados de su colaborador habitual, Nicholas Georgiadis, reflejan esto, retratando un mundo de lujoso esplendor corrompido por la miserable indigencia. Las espectaculares escenas de conjunto de MacMillan para toda la compañía crean vívidos y complejos retratos de las sociedades tan distintas de París y Nueva Orleans. Pero es el apasionado pas de deux de Manon y Des Grieux −que recuerda la intensidad del anterior Romeo y Julieta de MacMillan− el que impulsa esta trágica historia y convierte a Manon en uno de los dramas más poderosos de MacMillan.
Coppélia
Swanhilda se da cuenta de que su prometido, Franz, está obsesionado con la bella Coppélia, que lee sentada en su balcón día tras día. Coppélia, que está a punto de provocar la ruptura de la pareja, no es lo que parece y Swanhilda decide darle una lección a Franz… Esta singular versión de Coppélia del Bolshoi muestra una fascinante reconstrucción de la coreografía original del siglo XIX en esta exuberante comedia, que incluye una heroína de mucho carácter, un prometido de aspecto juvenil con un ojo estrábico, y un viejo fabricante de muñecos. El Cuerpo de Baile de la compañía brilla en los divertimentos y en la famosa «danza de las horas», y sus bailarines principales emanan una juvenil energía y un humor irresistible en esta efervescente producción.
El lago de los cisnes
El lago de los cisnes ha tenido un papel especial en el repertorio de The Royal Ballet desde 1934. Esta temporada, The Royal Ballet estrena una nueva producción con coreografía adicional del Artista Residente, Liam Scarlett. Aunque permanece fi el al texto de Petipa-Ivanov, Scarlett aporta una nueva mirada a la escenificación de este ballet clásico, en colaboración con su escenógrafo desde hace años, John Macfarlane. El lago de los cisnes fue la primera partitura de ballet de Chaikovski. Dado su estatus actual como probablemente el más amado y admirado de todos los ballets clásicos, resulta quizá sorprendente que en su estreno en 1877 El lago de los cisnes fuera pobremente acogido.
Es gracias a la producción de Marius Petipa y Lev Ivanov de 1895 como El lago de los cisnes se convirtió en parte no sólo de la conciencia del ballet, sino también de la más amplia cultura popular. Ese éxito viene asegurado no sólo por la sublime amplitud sinfónica de la partitura de Chaikovski, sino también por los llamativos contrastes coreográficos entre las escenas en el palacio real de Petipa y las líricas escenas junto al lago creadas por Ivanov.